LISBOA.- El jugador de la selección portuguesa Joao Pinto, expulsado el viernes en el partido contra Corea del Sur que dejó a los lusos fuera del Mundial de Corea-Japón, propinó un puñetazo al árbitro argentino que le mostró la tarjeta roja, Angel Sánchez, según registró el juez en el acta citada hoy por la radio portuguesa.
El presidente de la Asociación del Fútbol Portugués (FPF), Gilberto Madail, señaló que Sánchez acusa a Pinto en su informe oficial de agresión.
El mismo Sánchez lo confirmó al diario "Publico": "Pinto cometió una falta grave en la que atacó a un rival por detrás. Yo estaba decidido a expulsarlo. Entonces me lanzó un puñetazo con la mano izquierda hacia las costillas. Yo estaba desconcertado".
Inmediatamente después de la expulsión, el capitán portugués, Fernando Couto, puso sus dos manos en las mejillas de Sánchez, pero el argentino no tiene quejas sobre su conducta. "Couto quería tranquilizarme; su conducta fue muy correcta".
Por otra parte, la temprana eliminación de Portugal ha puesto en peligro la continuidad de Antonio Oliveiro en el banquillo luso, según Madail. La dirigencia de la FPF se reunirá para evaluar si Oliveira permanece en el cargo, apuntó. "Nunca exigimos a Oliveira que ganase el título con Portugal. Pero por supuesto esperábamos llegar más lejos".