SAO PAULO.- La Federación Internacional de Fútbol Asociado (FIFA) podría cambiar en el futuro la forma de elegir al mejor jugador del Mundial, que actualmente es definido en una votación realizada, en su mayor parte, antes de la final del torneo, además de introducir cambios en el sistema de arbitrajes en el fútbol mundial.
En una entrevista publicada hoy por el diario brasileño "O Estado de Sao Paulo", el presidente de la FIFA, Joseph Blatter, admitió la posibilidad de cambiar el criterio de elección del ganador del "Balón de Oro", que en el Mundial de Corea/Japón fue adjudicado al portero alemán, Oliver Kahn.
Esa decisión generó críticas porque, en la final contra Brasil, un error de Kahn abrió camino para el primer gol del doblete del astro Ronaldo y para la derrota de Alemania por 2-0 en la final.
"En general, Kahn fue extraordinario, pese a haber hecho un error en el partido final. No hay sentido en cambiar la metodología después que la decisión fue tomada, pero siempre tenemos que intentar tener el mejor sistema de elección", dijo Blatter.
Por otra parte, el dirigente confirmó que la FIFA probará en 2003 un nuevo sistema de arbitraje que introducirá los "árbitros de arco", con lo que aumentará de dos a cuatro el número de asistentes del árbitro principal, en un intento de reducir el índice de errores en ese campo.
El dirigente descartó la posibilidad de designar a dos árbitros para cada partido, pero se manifestó favorable a la idea del ex astro francés Michel Platini de agregar a dos asistentes más, que actuarían atras de cada una de las metas.
"En la Copa Italia y también en Brasil la experiencia de tener a dos árbitros en el campo de juego demostró que la idea no funciona en forma satisfactoria. Es necesario que exista una sola persona como autoridad máxima", dijo Blatter.
Según Blatter, la existencia de dos asistentes más permitiría "tener una visión desde un nuevo ángulo", lo que será probado por primera vez en el Campeonato Mundial Sub 20, que se realizará en 2003 en los Emiratos Arabes.
Al mismo tiempo, el presidente de la FIFA afirmó que la entidad estudia cambios en el sistema de selección de árbitros para los Mundiales de Fútbol, ante los graves errores registrados durante la disputa de Corea/Japón.
"Una de las ideas es la de tener solamente a los mejores árbitros, y no sólo una división regional de los convocados. Ello no significa que serán todos de Europa. Existen árbitros excelentes en todas partes del mundo", dijo el dirigente, quien sostuvo que los mayores problemas en el último Mundial "no estaban relacionados con el árbitro, sino con los asistentes".
En la entrevista al rotativo brasileño, Blatter reiteró que en septiembre presentará una propuesta sobre la reestructuración de la FIFA, cumpliendo una promesa hecha durante el tenso proceso que resultó en su reelección, poco antes del inicio del Mundial de Corea/Japón.
Al hacer un balance del último Mundial, Blatter destacó varios aspectos positivos, entre ellos la "organización casi perfecta" del primer campeonato realizado en Asia y dividido entre dos países.
"En lo que al fútbol se refiere, aunque no ha sido jugado en su más alto nivel en algunos momentos, seguramente fue apasionante y entretenido", afirmó.
Blatter destacó que la existencia de representantes de las cinco confederaciones continentales en los cuartos de final de Corea/Japón fue "resultado del trabajo de la FIFA en los 25 años, promoviendo el fútbol en el mundo".
Entre los aspectos negativos, además de los problemas de arbitraje, Blatter señaló el problema de las entradas: "las partes involucradas se reunieron y solucionaron el asunto durante el Mundial. Pese a la solución dada, el tema será investigado para identificar cuál fue el problema y quién fue el responsable".
Finalmente, el presidente de la FIFA sostuvo que el Mundial de Corea/Japón representó una prueba más del poder del fútbol de reconciliar a los pueblos.
"La FIFA y el fútbol son neutrales, pero sabemos que el deporte puede alcanzar, en algunas ocasiones, más resultados que la misma política. Durante el Mundial, el primo del imperador japonés afirmó que la Copa representó un acercamiento entre Japón y Corea (del Sur) que ni siquiera mil años de acciones diplomáticas podrían lograr. El fútbol es un idioma internacional", dijo.