AVILES, España.- El ciclista español Roberto Heras atacará de nuevo el martes en las montañas cuando se reanude la Vuelta a España para tratar de afianzar su posición de líder y alejarse de sus más cercanos perseguidores en la última semana de carrera.
Los "gigantes del camino" descansaron el lunes tras la agotadora etapa que terminó en el puerto de montaña del Angliru, en Asturias, con un inobjetable triunfo de Heras, del equipo US Postal.
"La ventaja que saqué no fue mala, pero después del martes sólo tengo La Covatilla para tratar de aumentar la diferencia", dijo Heras, que iniciará la próxima jornada con 35 segundos de ventaja sobre su compatriota Aitor González, del Kelme.
"Aitor González tiene la contrarreloj de Madrid a su favor", agregó Heras, quien indicó que ya González le ganó en la contrarreloj de Córdoba, pero cree que en los 41 kilómetros del día final en la capital española no podrá sacarle tanta diferencia.
El punto flaco de Heras es la ayuda que pueda recibir de su equipo estadounidense, pues tres de sus compañeros ya abandonaron la prueba: el canadiense Michael Barry y el noruego Steffen Kjaergaard, debido a lesiones, y el colombiano Víctor Hugo Peña al ser expulsado por ayudarse de un vehículo.
De los restantes compañeros de Heras (José Luis Rubiera, David Zabriskie, Antonio Cruz, Christian Vandevelde, y Matthew White), sólo el estadounidense Vandevelde es fuerte en las subidas.
El dominio de Heras en las montañas le permitiría sacar una buena ventaja en los 9,5 kilómetros de ascenso en el centro de esquí de La Covatilla, etapa que se disputa el jueves.
Sus rivales de Kelme, González y Oscar Sevilla, están enfrentados, pues Sevilla dijo que el acelerón de González en el Angliru fue la causa de que no pudiera mantener su paso.
Si González y Sevilla caen de sus puestos segundo y tercero, el también español Joseba Beloki, de ONCE, podría convertirse en el primer corredor en terminar en el podio del Tour de Francia y de la Vuelta, desde que ésta fue cambiada de abril a septiembre, hace siete años.
Sin embargo, Heras también tiene su ambición y es lograr que un corredor del equipo US Postal, liderado por el astro estadounidense Lance Armstrong, gane dos de las tres grandes vueltas en un mismo año, después que el español Miguel Indurain se impuso con Banesto en el Giro y el Tour de 1993.
