PARIS.- El mediocampista francés del Real Madrid, Zinedine Zidane, declaró que el objetivo con su club para esta temporada será "al menos ser campeones de España y hacer una buena actuación en la Liga de Campeones".
"Con el Madrid el objetivo es siempre el mismo, es decir, ganar todo. Aunque ya se sabe que es imposible ganar todo, pero lo importante es entrar en el campo con ganas de ganarlo todo y, a fin de año, tener el máximo posible de títulos", afirmó el jugador en una entrevista que concedió a uno de sus patrocinadores.
"A principios de año ganamos el primer título, la Supercopa de Europa (3-1 contra el Feyenoord holandés), y dentro de poco jugaremos la Copa Intercontinental. Pero el balance habrá que hacerlo a final de año", aseguró Zidane, que se encuentra concentrado con su selección para preparar el tercer partido de clasificación para la Eurocopa de 2004, que disputarán contra Malta el próximo miércoles.
Zidane se mostró satisfecho del partido que Francia jugó el pasado sábado contra Eslovenia (5-0), que permitió al equipo reconciliarse con su afición y sumar tres puntos en la carrera por clasificarse para la Eurocopa de Portugal.
"Con esta victoria hemos encontrado la serenidad que nos faltaba desde hace cuatro meses. Pero no debemos pensar que todo está ganado, que todo será fácil. Debemos continuar por el mismo camino, de forma seria y trabajando como la semana pasada en los entrenamientos", afirmó.
El mediocampista blanco alabó el juego esloveno, consideró el resultado como "demasiado fuerte para ellos", pero reconoció que el temprano gol de Patrick Vieira, a los diez minutos, facilitó la labor de los "bleus".
"El partido no fue tan fácil como puede parecer por el resultado. Nosotros lo hicimos fácil. Es bueno marcar pronto, porque las cosas son más sencillas. Luego encontramos nuestras sensaciones y nuestro juego, que es nuestra fuerza, y entonces es muy complejo jugar contra nosotros", dijo.
Zidane tuvo palabras de agradecimiento para los más de 70.000 aficionados que llenaron el pasado sábado el Stade de France, en el primer partido de los "bleus" en su campo desde el desastre del Mundial.
"El público acudió a la cita y quería ver a su selección. Querían ver a los ’bleus’ ganar y jugar bien. No vinieron a silbar a los jugadores y enseguida lo notamos. Eso hace bien al corazón. Nosotros teníamos que demostrar que también queríamos mirar hacia delante y demostrar que el fracaso del Mundial no es más que un mal recuerdo", señaló.
En cuanto a Malta, su próximo rival, Zidane afirmó que el partido "se anuncia difícil", pero que deberán ganar "para seguir por el buen camino".
"No hay que confiarse, sino recordar el buen partido del sábado. Tenemos ganas de trabajar y demostrar que hemos reencontrado nuestro equipo", afirmó.