MADRID.- La Comisión de Fórmula Uno de la Federación Internacional del Automóvil (FIA) se reunirá este lunes en el hotel Hilton del aeropuerto londinense de Heathrow, para estudiar las propuestas de cambio en la Fórmula Uno, para hacerla mas competitiva y espectacular.
Las decisiones que se tomen mañana serán ultimadas en otra reunión el 12 de diciembre en Montecarlo y al día siguiente recibirán el visto bueno del Consejo Mundial, reunido en el Principado para celebrar la entrega de premios a los diversos campeones.
Las propuestas elaboradas durante los últimos 15 días por el presidente de la FIA, Max Mosley, así como por su vicepresidente Bernie Ecclestone, de lastrar los coches con un kilo por punto conseguido, a partir de los veinte, así como el de rotar a los pilotos que correrían cada Gran Premio en un coche distinto, están muy lejos de agradar a las escuderías, medidas que consideran contrarias al espíritu deportivo y a la esencia de la Fórmula Uno.
Los cambios propuestos por Mosley y Ecclestone van encaminados a evitar que un dominio como el ejercido este año por la escudería Ferrari continúe alejando a los espectadores de los circuitos y de los televisores, con la merma de ingresos que eso supone.
Las principales escuderías, con Ferrari a la cabeza, se oponen abiertamente a que se penalice a quien más y mejor a trabajado, y el presidente de Ferrari, Luca Cordero di Montezemolo, ha declarado abiertamente que su casa podría abandonar la Fórmula Uno si salen adelante lo que llama "medidas estúpidas".
Los constructores, reunidos este fin de semana para preparar la reunión de mañana, creen que además de dar interés a la Fórmula Uno hay que modificar, de inmediato, el dinero que genera esta competición, que ahora es tan sólo el 47 por ciento de lo que generan los derechos de televisión, y pretenden el 80 por ciento del total de todos los ingresos como entradas a los circuitos y venta de artículos.
Si algunas de las nueve propuestas que han presentado los constructores Mosley y Ecclestone tienen muy pocas posibilidades de llegar al Consejo Mundial de la FIA del 13 de diciembre, como la de la rotación de los pilotos, otras como la de modificar las sesiones de clasificación, que volverían de nuevo a ser viernes y sábado, o el limitar el número de motores o chasis, podrían recibir el respaldo de los constructores.
Las nueve propuestas hechas a los constructores, que se estudiarán este lunes en Londres, así como las que puedan presentar las escuderías, son las siguientes.
- Cambio de pilotos: los pilotos conducirían un coche distinto cada uno de los primeros diez Grandes Premios, y a partir de éste el primero en la clasificación elegiría los que siete que pilotaría en el resto del campeonato, y así los harían el segundo, tercero, etcétera.
- Sesiones de clasificación: dos el viernes y dos el sábado de treinta minutos cada una, separadas por cinco minutos. Un total de ocho vueltas por sesión y suma final de tiempos para establecer la formación de salida.
- Neumáticos: los constructores podrán fabricar neumáticos específicos para cada escudería.
- Lastre: a partir de los veinte puntos un kilo por punto conseguido.
- Pruebas: prohibición de probar en los circuitos en que se corran los Grandes Premios. Doce días de pruebas entre el 28 de febrero y el 1 de noviembre.
- Aerodinámica: una sola evolución a lo largo de la temporada.
- Motores: un motor por carrera en 2003; un motor para cuatro carreras en 2004; un motor para ocho carreras en 2005.
- Caja de cambios: una para varias carreras.
- Electrónica y frenos: común para todos los coches.
La composisicón de la Comisión de Fórmula Uno es la siguiente: Max Mosley (presidente FIA), Bernie Ecclestone (vicepresidente), representantes de cada una de las escuderías (11), representantes de los organizadores europeos (4), representantes de los organizadores del resto del mundo (4), representantes de los patrocinadores (2), representantes de los constructores de motores (1) y representante de los constructores de neumáticos (1).