MEXICO.- El chileno Sebastián González se aseguró de que la pelota estaba fuera del alcance del portero, entonces se levantó la camisa y con el pretexto de celebrar su decimotercer gol en México dejó ver una camiseta blanca con la bandera chilena y la insignia de Colo Colo, el verdadero club de su corazón.
González, del Atlante, se convirtió en el mejor extranjero de la última jornada de eliminatorias del torneo de Apertura del fútbol mexicano al anotar dos goles, uno de penal, en el partido ganado por su equipo por 4-1 al Veracruz.
Por una combinación de resultados el Atlante quedó fuera de los cuartos de final, pero al chileno la temporada le resultó menos amarga porque terminó como subcampeón de goleo y resultó ser el debutante de mejor rendimiento en el circuito.
En su primer torneo en México, "Chamagol" González convenció a quienes lo contrataron por un año a cambio de 200.000 dólares, al convertir 13 dianas en 19 encuentros con un cuadro colocado apenas en la segunda mitad de la tabla.
Medallista de bronce en los pasados Juegos Olímpicos con la selección de Chile, Sebastián González fue campeón de goleo del pasado torneo de Apertura de su país, con 18 anotaciones, y ahora en México demostró que para los buenos jugadores no hace falta un período de adaptación.
Atlante sacó provecho de la crisis económica del equipo de Chile y adquirió a un excelente jugador a un precio bajo, sin embargo González sigue con los colores de Colo Colo en el corazón, aunque en este medio año ha sido fiel a Atlante en la cancha.
Con respecto a Colo Colo, González tiene una historia diferente a la de los buenos jugadores, primero fue miembro de la hinchada del club y después su principal goleador.
Aún con cara de niño, el delantero está llamado a convertirse en uno de los protagonistas del fútbol mexicano, a no ser que emigre a Europa, donde se le pueden abrir puertas por su probada calidad y olfato para anotar.
Rápido y con gran sentido para estar a la hora precisa en el momento ideal, González encabezó la legión chilena en la liga, delante de figuras de más historia como Reinaldo Navia, con nueve goles, e Iván Zamorano, con cuatro.
Aún así el joven no salió mucho en los diarios porque el paraguayo José Saturnino Cardozo implantó un récord de 29 goles en 19 encuentros, calificado de "grosero" por los medios que adoran a Cardozo.
Sin embargo, después de la actuación del chileno, lo mejor del torneo de Apertura este año lo ha hecho un debutante con un equipo flojo. Lo más notable es que a pesar de comportarse como un profesional y entregarse al Atlante, a la hora de mostrarse sentimental demostró que no olvida su raíz.
Por eso quiso que todos supieran que si bien goza con los goles a favor del Atlante, debajo de la playera de su equipo lleva a Colo Colo. "Es que no puedo olvidarme de los colores de mi corazón", dijo al terminar su último partido de la temporada.