NUEVA YORK.- El ruso Gari Kasparov, que conducía las negras, y el ordenador ’Deep Junior’ hicieron tablas en la cuarta partida del encuentro que disputan en Nueva York, que queda así empatado a dos.
El martes, con blancas, el número uno del mundo tendrá la penúltima oportunidad de romper el marcador a su favor.
Inicialmente fiel a su estilo, Kasaparov arrancó con una Defensa Siciliana. Pero la variante Taimanov, en la jugada 8, se convirtió en un laberinto que sacó al programa del libro.
Todo apuntaba que sucedería lo mismo que en la primera partida, ganada por el jugador de carne y hueso. Con h3 y f3, el blanco dejaba agujeros negros frente a su enroque.
Kasparov maniobraba a distancia, con la dama en b8 y el alfil en a8.
Fue entonces cuando ’Deep Junior’ abrió las hostilidades en el flanco de dama: b4, a4, a5... Pronto situó un peón en b6, despreocupándose del material.
En la jugada 49 el ordenador tenía un peón de más, precisamente el peón de b6. Pero las cuatro torres estaban presentes en el tablero y, una vez que se bloqueó el flanco de rey, las partes acordaron tablas, pues aunque el ordenador opinara que su posición era ventajosa, no tenía forma de progresar.
La quinta partida se jugará mañana, martes, y la sexta y última el jueves.
Kasparov se lleva un fijo de 500.000 dólares por jugar, a los que sumará 300.000 si gana y 200.000 si pierde.