DURHAM, Carolina del Norte.- El alero de los Magic de Orlando, Grant Hill, volvió a pasar ayer por el quirófano para ser operado por cuarta vez del tobillo izquierdo, sin que los doctores puedan asegurar cuándo podrá jugar de nuevo.
Sin embargo, la intervención quirúrgica, que fue considerada todo un éxito, es la única esperanza que le queda al jugador de los Magic de poder continuar su carrera como profesional de la NBA.
Hill, de 30 años, se lesionó el tobillo cuando jugaba la fase final del campeonato de 2000 con los Pistons de Detroit, que posteriormente lo traspasaron a los Magic, equipo con el que firmó un contrato por siete años y 93 millones de dólares.
El 80 por ciento de los 32,5 millones de dólares que ha cobrado Hill desde que llegó a los Magic ha sido abonado por el seguro que le había comprado el equipo.
Los doctores que operaron a Hill le quitaron los tres tornillos y una placa metálica que le habían sido colocados en el tobillo en las intervenciones anteriores y le realizaron un trabajo de reconstrucción con material genético que le ayudara en la formación del hueso.
Los especialistas consideran que si todo el proceso de recuperación marcha como esperan, Hill volverá a jugar en plenitud de forma, pero no pudieron establecer una fecha concreta para su vuelta a la competición.
Aunque el cirujano James Nunley, responsable de la operación de Hill, dijo que no había ninguna razón médica que le impidiese al jugar volver en plenitud de forma.
"El hueso está fuerte, tiene un buen riego sanguíneo y nos sentimos muy satisfechos de la manera como se realizó la operación", subrayó Nunley, un cirujano ortopédico.
Hill fue fichado junto con Tracy McGrady para ser las dos nuevas estrellas de los Magic, pero por culpa de las lesión del primero todavía no han podido dar al equipo el rendimiento que esperaban los directivos.
"Tenemos toda la esperanza de que Hill volverá en plenitud de forma y que al final será el jugador estrella que triunfe con nuestro equipo", declaró John Gabriel, gerente general de los Magic.
En los seis primeros partidos de la temporada, de los que Magic ganó cinco, Hill jugó en plenitud con McGrady para conseguir un promedio de 14,6 puntos con un 50 por ciento de acierto en los tiros de campo.
