LA PLATA.- Gimnasia y Esgrima de La Plata no pudo quebrar hoy la resistencia del arquero Nelson Tapia y terminó igualando sin goles ante Cobreloa, por el grupo 4 de la Copa Libertadores.
La soberbia actuación del experimentado arquero chileno fue la clave para que Cobreloa se lleve un empate en el difícil reducto del bosque platense, y ambos conjuntos continúan liderando la llave con 6 unidades, mientras que luego se encolumnan Olimpia de Paraguay con 3 y Alianza Lima con 1 unidad.
Gimnasia fue el que tomó la iniciativa desde el comienzo del partido, pese a que la primera situación de peligro la generaron los loínos, cuando a los 3’ Fuentes envió por arriba del travesaño un balón que dejó corto el arquero Olave.
Con más ganas que criterio, el conjunto local buscó llegar hasta el área rival, pero la defensa de Cobreloa se mostró firme y criteriosa para echar por tierra cada incursión rival.
Gimnasia llegó con peligro hasta la valla de Tapia a los 23’, cuando San Esteban ejecutó un tiro libre que el experimentado portero chileno envió al córner.
Cobreola apostó al contragolpe, dejándole la iniciativa a Gimnasia que volvió a crear peligro cuando Enría entró por derecha y remató al arco, pero Tapia evitó nuevamente la caída de su valla.
Las ganas de Gimnasia no lograron nunca transformarse en un criterio de juego, porque sus líneas estuvieron demasiado desconectadas, y así sus delanteros pocas veces estuvieron de manera clara frente a Tapia.
El defensa San Esteban tuvo otra clara ocasión a los 48’, pero no pudo definir con criterio en inmejorable posición.
Los minutos consumían las ansias de Gimnasia y Tapia mostró nuevamente sus reflejos cuando a los 52’ sacó un disparo de Leiva, y luego Verón sacó en la línea un remate de Lobos.
El conjunto dirigido por Nelson Acosta se refugió demasiado en su campo, en particular en su área, que lo único que hizo fue dejarle el balón a Gimnasia y engrandecer la figura de Tapia, que se las tuvo que ver con las alturas de Sosa y Federico Turienzo, a quienes buscaron en el juego aéreo.
Precisamente fue Sosa el que desperdició una inmejorable oportunidad a los 70’,cuando su cabezazo se fue cerca del poste derecho, mientras que diez minutos más tarde otra vez Tapia le ahogó el grito de gol al "Pampa" Sosa.
Los últimos minutos, con Acosta gritándole a los suyos y Tapia atajando todo, pasaron volando para los argentinos, que también debieron luchar con la rapidez de Madrid y los enganches de Martel. Pero ya no había tiempo y el 0-0 quedó marcado.
