SANTIAGO.— El delantero chileno de la Juventus de Italia Marcelo Salas, abandonó una clínica de la capital sintiéndose "muy bien", un día después de ser operado para corregir la rotura del menisco exterior de su rodilla derecha, y no descartó una posible transferencia a River Plate.
El jugador salió caminando, con una leve cojera, acompañado de su hija pequeña, Camila.
Salas fue operado por el médico de la selección Fernando Rádice, y permanecerá dos semanas en recuperación en Chile, antes de retornar a Italia. No podrá jugar por lo menos dos meses.
Salas no comentó sobre su operación, recordando que los médicos ya indicaron que fue un procedimiento simple y que se desarrolló sin contratiempos. Rádice dijo el día anterior que Salas sólo tenía comprometida una pequeña porción del menisco.
Salas dijo que se siente muy bien tras la operación, que duró apenas unos 30 minutos.
Consultado sobre versiones de que podría volver a River Plate de Buenos Aires, dijo que no consideraría eso como un retroceso en su carrera. Agregó que incluso le contaron que en Argentina están vendiendo camisetas con su nombre.
Pero reiteró que le quedan casi dos años de contrato con Juventus, y que seguirá en el club si no surge una transferencia que considere conveniente. Salas ha estado en el banco la mayor parte del tiempo esta temporada.
El jugador se lesionó cuando practicaba con su club, en Turín, antes de viajar a Chile para integrar la selección. Debido a la lesión no pudo jugar en los dos encuentros amistosos con Perú.
