SANTA CRUZ.- La selección de Colombia desperdició la oportunidad de coronarse campeón Sudamericano Sub 17 al perder hoy con Uruguay (1-3) y sirvió en bandeja esta posibilidad para Brasil o Argentina, que se enfrentarán en el último partido del torneo que se disputa en Bolivia.
Los colombianos llegaron al encuentro como los grandes candidatos, tras una notable campaña en la que derrotaron a Brasil y empataron con Argentina.
No obstante, esta aparente ventaja no se corroboró hoy en la cancha por el nerviosismo y la falta de aplomo de los jugadores colombianos frente a un equipo uruguayo que aprovechó la desesperación de sus rivales y se despidió del torneo con dignidad.
Los "cafeteros" perdieron la línea en todos los sectores del campo de juego y sus grandes figuras, Fredy Guarín y José Otalvaro, estuvieron con las luces apagadas.
Aparentemente, los colombianos no pudieron manejar la ansiedad y la presión que sentían antes del encuentro, por la posibilidad de coronarse por primera vez campeones sudamericanos de la categoría, y se dejaron llevar por los nervios que, en realidad, fueron hoy su principal enemigo.
Colombia se lanzó desde el inicio al ataque con el propósito de desequilibrar el partido y abrir el marcador lo más rápidamente posible, para después no sufrir y desesperarse, como finalmente sucedió.
En ese afán encontró muchos problemas en la definición frente a un equipo uruguayo suelto, que esperó en el fondo tranquilo y sin ninguna presión porque, ya eliminado, jugaba prácticamente para cumplir con el calendario.
Antes de los 10 minutos, los delanteros colombianos José Otalvaro y Carlos Hidalgo se perdieron la posibilidad de inaugurar el marcador al desviar sus remates en la boca del arco.
Estos errores lo pagaron caro pues, cinco minutos después, el delantero uruguayo Diego Rodríguez culminó una combinación rápida, para abrir el marcador y congelar las aspiraciones colombianas de coronarse campeones sudamericanos.
Tras el gol uruguayo, los nervios hicieron presa de Colombia, que perdió la seguridad en las salidas y ofreció claros en su línea defensiva.
A los 33 minutos, revivió la esperanza colombiana cuando el defensa Pablo Estifer se mandó al ataque en una veloz carrera por la izquierda y, con un potente disparo de media distancia, logró el empate transitorio.
Pero la noche no era propicia para los pupilos de Eduardo Lara pues una vez más los uruguayos se pusieron arriba en el marcador con un golazo de Juan Albín (m. 37).
Los uruguayos justificaron la victoria porque supieron equilibrar sus líneas, porque administraron mejor la pelota y porque el centrocampista, Juan Albín, marcó la diferencia.
Colombia se salvó de sufrir una derrota más apabullante sólo porque los delanteros uruguayos fallaron en al menos dos oportunidades claras de gol.
Juan Albín estrelló un cabezazo en el palo colombiano, a los 67 minutos, y Rodrigo Cubilla perdió en el mano a mano con el meta colombiano, a los 79’.
Finalmente, Pablo Di Fiori sentenció el encuentro anotando el tercer gol uruguayo a un minuto de tiempo añadido.
Los colombianos perdieron la opción de coronarse campeones de la competición, pero están clasificados al Mundial de Finlandia 2003.