BUENOS AIRES.- El técnico chileno Manuel Pellegrini no va a dejar su cargo en River Plate de Argentina a pesar que su equipo fue eliminado en cuartos de final de la Copa Libertadores a manos del América de Cali de Colombia, dijo el viernes el entrenador.
"No hay posibilidad de renuncia", dijo Pellegrini a periodistas para alejar los rumores de la prensa local sobre un posible alejamiento de la institución.
Pellegrini, quien llegó a River a mediados de 2002 y aún no pudo ganar ningún torneo con el equipo "millonario", tendrá el domingo un examen importante cuando su equipo enfrente a Boca Juniors, por la decimocuarta jornada del torneo Clausura local.
"River no es una bomba de tiempo, ni un incendio, como andan diciendo por ahí... No hay ninguna posibilidad de renuncia", destacó el entrenador.
Respecto de su continuidad en la institución, el chileno destacó que "al terminar el contrato al final de la temporada, se evaluarán los resultados obtenidos, y recién entonces será el momento de tomar una decisión".
Pellegrini tiene contrato con River hasta fin de mayo, pero el vínculo se renueva de manera automática hasta la última jornada del Clausura.
El gran objetivo de River para el primer semestre del año era la obtención de la Libertadores, y la eliminación ante el América de Cali fue un duro golpe para el equipo y sus seguidores.
Ahora, el plantel debe afrontar el choque del domingo ante Boca, donde se jugará buena parte de sus chances de lograr el título doméstico.
Boca lidera la competencia junto a Vélez Sarsfield con 31 puntos cada uno, y le lleva uno de ventaja a River, el escolta más cercano.
Pellegrini explicó en qué aspectos hizo hincapié para el choque del domingo: "Se tiene que trabajar en todos los aspectos, en lo futbolístico y en lo anímico", remarcó el entrenador.
"El domingo, River tiene que jugar como lo hizo durante toda la temporada, excepto los 15 minutos contra el América" (donde a River le convirtieron tres goles), agregó.
En su único partido oficial con Pellegrini como entrenador ante el clásico rival, River perdió 2-1 como local por el torneo Apertura 2002.
