PARÍS.- El tenista holandés Martin Verkerk tomó hoy con gran tranquilidad su derrota en la final de Roland Garros, y prefirió destacar que llegó desde la nada al encuentro decisivo de uno de los cuatro torneos más importantes del mundo.
"No hay palabras para decir lo que es estar en la final de un Grand Slam. Aún estoy soñando, y creo que seguiré soñando por un tiempo más", dijo el holandés de 24 años tras su derrota ante el español Juan Carlos Ferrero.
Verkerk no tuvo ninguna posibilidad ante Ferrero en su derrota por 6-1, 6-3 y 6-2. Los seis juegos que el holandés le arrebató a Ferrero son la peor marca para un finalista desde que el sueco Bjorn Borg le concediera sólo cinco al argentino Guillermo Vilas en 1978.
Pero Verkerk no cree que eso deba arruinarle la vida. "No, me levanto cada mañana feliz, con una gran sonrisa", aseguró. Número 46 del ranking mundial al comenzar el torneo, Verkerk llegó a la final de Roland Garros en su primera presentación en el torneo y en el tercer Grand Slam de su vida.
El holandés destacó que "el mejor jugador ganó hoy", y se lamentó de no haber detectado la presencia de la top-model holandesa Karen Mulder.
"¿Estaba aquí? Algo bueno hoy y no lo veo...", dijo entre risas y desatando las carcajadas de la sala de prensa. "¿Estás seguro?", preguntó. "Quizás esté esta noche en París, así podré ver si la encuentro".
