EAST RUTHERFORD, Estados Unidos.- El pobre espectáculo deportivo que han dado hasta ahora los Spurs de San Antonio y los Nets de Nueva Jersey en los tres partidos que llevan disputados de las finales de la NBA le ha obligado a reconocer a ambos equipos que necesitan hacer mejor las cosas de cara al futuro.
En juego estará no sólo un título de liga sino que también el prestigio y el darle a la competición la calidad que le permita recuperar la imagen que ha perdido desde que comenzó la competición.
"Cometimos demasiados errores en el tercer partido y debemos hacer mucho mejor las cosas en el cuarto si queremos conseguir la victoria", comentó Byron Scott, entrenador de los Nets. "La verdad es que por lo que demostramos en el tercer partido no fue algo que nos coloque como posible equipo campeón".
La ironía de las finales es que hace una semana, los Spurs parecieron dispuestos a conseguir al base estelar de los Nets, Jason Kidd, cuando a partir del próximo 1 de julio se convierta en agente libre, pero después de lo visto en los tres primeros partidos, sus intenciones han comenzado a cambiar.
Tony Parker, base de 21 años y dos temporadas de experiencia en la NBA, les ha demostrado con estadísticas que si hay un jugador con futuro dentro del equipo tejano es precisamente su persona.
Parker hundió a los Nets con 11 puntos, incluyendo dos triples, en el período final en ruta de encestar 26 puntos y dio seis asistencias para ser el protagonista del equipo y asegurar que los Spurs triunfen por 84-79 y tomen una ventaja de 2-1 en la serie frente los Nets.
Después de una victoria crítica fuera de casa, el equipo de los Nets perdió la gran oportunidad de ponerse con ventaja después que los Spurs les regalaron 17 perdidas de balón y fallos claves desde la línea de personal.
"Es triste ver como estamos con la eliminatoria abajo después de haber conseguido la victoria en San Antonio", comentó Lucious Harris, el jugador que con 1:18 para finalizar el tercer partido perdió un balón ante la excelente defensa del escolta argentino Emanuel Ginóbili. "Creo que se nos está criticando muy duro porque no hicimos bien las cosas en un partido".
Kidd, quien brilló en el segundo partido, no le dio a su equipo lo que necesitaba en el tercero al ser dominado en su batalla frente Parker.
"No tenemos que aportar excusas, tenemos que mentalizarnos para hacer bien las cosas en el cuarto partido y eso es lo único que ahora importa", comentó Kidd. "Tuvimos la oportunidad de ganar el tercer partido y no la supimos aprovechar".
Los Nets han demostrado que no pueden superar la defensa en zona de los Spurs y eso es una de las razones por lo que se quedaron con sólo un 37 por ciento en los tiros de campo.
Cuando los Spurs utilizan esa defensa, el ataque de los Nets no pudo anotar nada más que dos puntos en un parcial de 14-2 favorable al equipo de San Antonio, que decidió en el cuarto período.
Gregg Popovich, entrenador de los Spurs, reconoció que el surgir de jugadores como Malik Rose, Ginóbili y especialmente Parker fue la clave que ha permitido a su equipo conseguir un triunfo que puede ser decisivo para la serie de cara al futuro.
Los Spurs también tuvieron sus problemas al perder el balón 17 veces y fallar en los tiros libres, los dos factores que les costó la derrota en el segundo partido y de no haber sido por Parker y Ginóbili pudieron haber tenido el mismo resultado en el tercero.
"Logramos la victoria, pero no podemos seguir con los mismos errores y debemos comenzar a consolidar nuestro juego con mejor control del balón y más acierto en los tiros de personal", comentó Popovich.
Al final del entrenamiento de la jornada de descanso, tanto Popovich como Scott fueron unánimes en reconocer que sus equipos todavía no habían dado lo mejor de su baloncesto y confiaban que pudiesen hacerlo a partir del cuarto partido que se disputará el miércoles, en el mismo escenario del Continental Airlines Arena.