SANTIAGO/TALCAHUANO.- Tejas fue la figura del partido. Y eso habla bien de Huachipato, de los espacios que se crearon frente a la portería de Cobreloa. Pero si no fuera por el oportunismo de Chavarría y la insistencia de Bongioanni, los de la usina no habrían conseguido el triunfo por 2-1 en el partido de ida por las semifinales del torneo Apertura.
Calama será el escenario de la definición de un finalista del Apertura.
Le costó al conjunto local lograr los tres puntos que le permiten llegar el sábado a Calama con esperanza. Si durante 60 minutos la defensa que lideran Fuentes y Verón respondió ante todas las formas de ataque de los locales, luego se vio sobrepasada por los enganches del argentino, por la fuerza del monteaguilino y por la "cabeza dura" que es el técnico Oscar Garré, que no se cansó de gritar y gritar a los suyos, hasta que la ventaja llegó en los descuentos del partido (minuto 93).
Los de Calama comenzaron errando un penal (Díaz lanzó con demasiada confianza a los cuatro minutos, permitiendo la reacción felina de Gatti), pero 11 minutos después el mismo Díaz liquidó un centro atrás de Boris González. Ahí creció el cuadro de Nelson Acosta.
Martel y Galaz se dieron maña para tener el balón, administrarlo en una cancha que no era propicia para eso por el barro que la cubría; Morán se fue afirmando poco a poco con los gritos y las "enseñanzas" de su DT, que le gritaba desde la banca; y Díaz se convertía en el socio de todos para hilvanar jugadas.
Pero eso se fue diluyendo. Millar, Bongioanni y Chavarría se echaron el equipo en los hombros, cargaron con lo que tenían a mano -fuerza, gambetas, centros, empujones y coraje- y terminaron dando vuelta el partido en la etapa de complemento, cuando Cobreloa se cerraba atrás para aguantar el 1-0.
En once minutos (82 y 93), Mancilla y Chavarría le dieron la agónica victoria a los de la usina. Pero en ambos tantos, el gestor fue Bongioanni, desbordando, dribleando y colocando sendos pelotazos en el corazón del campo naranja. Sus compañeros sólo lo cerraron.
Con el 2-1, Huachipato respira tranquilo. Hizo lo máximo para ganar de local y planificar una "fortaleza" para ir a Calama en busca del empate. De lo contrario, el alargue o los penales estarían ahí, en igualdad de condiciones para ambos.