NURBURGRING, Alemania.- El colombiano Juan Pablo Montoya (Williams-BMW) será el principal rival de los hermanos Schumacher, Michael (Ferrari) y Ralf (Williams-BMW), el próximo domingo en el circuito de Nurburgring, escenario del Gran Premio de Europa, situado a menos de un centenar de kilómetros del domicilio de los alemanes.
Con la moral por las nubes tras las pruebas que realizó la semana pasada en el circuito inglés de Silverstone y su victoria en Mónaco y el tercer puesto en Canadá, Montoya está convencido de seguir con la buena racha y el ambiente que se respira en la escudería Williams-BMW.
El pasado año Montoya logró el primer puesto en la formación de salida, pero no pudo concluir la carrera, algo que espera hacer este año y en el puesto más alto del podio para poder mezclarse en la lucha por el título.
Sin embargo, después de lo ocurrido hace dos semanas en Canadá con los cuatro primeros clasificados, Michael Schumacher, Ralf Schumacher, Montoya y el español Fernando Alonso (Renault), en menos de dos segundos al iniciarse la última vuelta, este fin de semana puede ocurrir cualquier cosa.
El Ferrari del vencedor Michael Schumacher se vio todo el fin de semana superado por los Williams-BMW, cuyos pilotos no supieron imponer su potencia, y Fernando Alonso, en uno de los circuitos que menos favorecían a su coche, terminó pegado a los primeros y con la vuelta rápida en carrera.
El trazado del Nurburgring, que solicita mucho apoyo aerodinámico, favorece en teoría al Renault de Alonso, que además tendrá la ventaja suplementaria de poder rodar mañana por la mañana dos horas, para familiarizarse con la pista, modificada el pasado año cuando no corrió.
En los entrenamientos realizados la semana pasada en el circuito de Jerez, Fernando Alonso fue el más rápido y pudo comprobar el buen rendimiento de los neumáticos Michelin que podrá utilizar este fin de semana.
Ahora Alonso tendrá que esperar a que mañana se inicien las pruebas y las teorías se correspondan con la realidad y pueda estar en condiciones de luchar por la victoria, algo que se esperaba pudiera hacer en Mónaco y luego no fue así, y lo hizo en Montreal, cuando nadie lo esperaba.
Nadie duda de que el circuito será una marea roja de gorras y banderas para apoyar al alemán, vencedor en tres ocasiones en este trazado, aunque su resultado final puede verse comprometido por el rendimiento de sus neumáticos Bridgestone.
La carrera del domingo es también muy importante para Michael Schumacher, porque si logra terminar entre los ocho primeros se convertirá en el primer piloto en la historia de la Fórmula Uno, en sumar mil puntos, ya que sólo le falta uno para lograrla.
Si el nivel actual de Ferrari, Williams-BMW y Renault está muy igualado, no se puede decir lo mismo de la escudería McLaren-Mercedes, que en Canadá perdió la cabeza de los campeonatos de pilotos, con el finlandés Kimi Raikkonen, y de constructores, en favor de Michael Schumacher y Ferrari.
A los resultados desastrosos de Canadá, al que contribuyó el tercer fallo en lo que va de temporada de Kimi Raikkonen en la sesión de clasificación, que le obligó a partir desde el último puesto, hay que sumar que el coche que debería utilizar esta temporada, el MP4/18, aún no está listo y tardará en estarlo, cuando se ha disputado ya más de la mitad del campeonato.
Sin embargo, este Gran Premio de Europa que se disputa en territorio alemán es un de las pruebas claves para el calendario de McLaren, cuyos coches están impulsados por motores Mercedes, que siempre buscan triunfar ante su público.
Mañana por la mañana, de 8.30 a 10.30 locales, las escuderías Renault, Jaguar, Jordan y Minardi, harán una sesión de entrenamientos previos y posteriormente, de 11 a 12 habrá una sesión libre para todos y a partir de las 14 horas se hará la sesión de clasificación, para establecer el orden de salida en la del sábado, que establecerá la formación de salida.
