SANTIAGO.- Todas las dudas que pudo haber dejado Colo Colo en algunos momentos quedan resueltas en el global. Ante Universidad de Concepción, los pupilos de Jaime Pizarro le entregaron el protagonismo a la visita, pero cuando olieron sangre fueron implacables.
Importante en este tramado fue Marcelo Espina. Y no sólo por su participación en los goles de Manuel Neira (15') e Iván Zamorano (83' y 90'), sino especialmente por tratarse del verdadero barómetro de lo que aconteció este jueves en Macul.
El volante argentino dosificó los esfuerzos de un mediocampo que careció (¿careció?) de Marco Antonio Villaseca, expulsado promediando el primer tiempo, y tuvo el arrojo para asumir la resistencia cuando el cuadro del Campanil se planteó el empate como opción.
Un planteamiento a medias, porque los de Fernando Díaz respetaron demasiado. Primero, el DT, que "castigó" la torpe expulsión de Andrés Oroz en El Salvador con el ingreso de Juan Carlos Ramírez en la banda izquierda. El sanbernardino relevó a Ramírez a los 40', pero dejó la impresión de haber perdido valiosos minutos en cancha.
Además, su ingreso coincidió con la doble marca propuesta por Pizarro: Marco Millape y Villarroel.
Luego, Jorge Valdivia. Con la complacencia de Guido Aros, Colo Colo le bajó los humos a "El mago", que no pasó de ser un remedo de lo mostrado en las últimas fechas. En virtud, manejo de los tiempos y personalidad, el oriundo de Maracaibo quedó al debe.
Finalmente, la torpe expulsión de Mauricio Cataldo, cuando los penquistas asolaban la meta del (otra vez) impecable Jonny Walker. La restitución de la igualdad numérica acompañó la restitución del fútbol de Colo Colo, que en dos trazos puso el 3-0.
De esta manera, Jaime Pizarro viajará a Concepción con la misión de rescatar un empate, idea no descabellada si se aprecia el ascendente rendimiento del fondo albo, tras la derrota ante la UC. De no conseguirlo, podrá desnivelar en el alargue o mediante lanzamientos penales.
Quizás la única incógnita que resta es dónde se quedó el fútbol Universidad de Concepción. Si fue en Concepción, valdrá la pena ver la revancha, el próximo domingo.