MADRID.- El futbolista inglés David Beckham llegará este martes a Madrid, una ciudad que espera al ex jugador del Manchester United en medio de una expectativa mediática sin precedentes.
La nueva estrella del Real Madrid, de 28 años, pasará la revisión médica obligatoria y el miércoles será presentado con la camiseta blanca en un acto que superará todo lo imaginable.
"El Real Madrid ya concedió más de 500 acreditaciones y vendrán países de casi todo el mundo, incluyendo Japón, China, Estados Unidos, Argentina, Brasil y, por supuesto, prácticamente toda Europa. Nunca una simple presentación generó tanto interés. Estamos desbordados", admitieron a DPA fuentes del club blanco.
Habrá periodistas de 40 países, y 30 cadenas de televisión de todo el mundo anunciaron ya que emitirán en vivo la presentación del mediocampista, cuyas características exceden largamente a las de un jugador de fútbol, algo que el Real Madrid sabe de sobra.
Por eso el club tuvo especial cuidado en seleccionar las acreditaciones, y estará prohibido el acceso al Pabellón Raimundo Saporta, donde se celebrará el acto, a cualquier medio de la llamada "prensa rosa".
"Se dejó claro a los medios descartados que será un acto de presentación de un futbolista. No queremos convertir esto en una caricatura", precisaron las mismas fuentes.
Ningún partido disputado por el Real Madrid esta temporada generó tal avalancha de peticiones de acreditaciones. Por ejemplo, en el encuentro de las semifinales de la Liga de Campeones disputado por el equipo blanco ante la Juventus italiana, la presencia de periodistas se quedó en poco más de la mitad de las que tendrá la presentación del astro inglés.
Pese a sus prevenciones, el club sabe que no podrá impedir que los "paparazzis" se agolpen en las proximidades del recinto para captar instantáneas que vender.
Las agencias y fotógrafos de la "prensa rosa" ya se frotan los dedos ante un producto que se venderá no sólo en España, sino también en el extranjero. Según aseguraba ayer el diario "El Mundo", una legión de "paparazzis" británicos llegará a Madrid entre hoy y el miércoles, aunque algunos están ya desde hace varios días.
Beckham es mucho más que un simple jugador de fútbol, como bien demostró en su lucrativa y apoteósica gira comercial por Asia.
De vuelta a Londres, y justo antes de viajar a Madrid, organizó una fiesta de despedida en el Nells Bar, donde se sirvió comida española para comenzar a adaptarse a algunas de las que serán sus nuevas costumbres.
Esa fiesta, a la que asistieron personajes tan populares como el cantante Elton John o la actriz Liz Hurley, le costó al matrimonio Beckham 6 millones de euros (unos 6,85 millones de dólares).
En el club blanco se pretende desligar la figura futbolística de la figura pública y festiva. Insisten en que se trata de una estrella que costó 25 millones de euros (unos 28,5 millones de dólares) y que dará aún más lustre a una plantilla que ya tiene a superestrellas como el portugués Luis Figo, el francés Zinedine Zidane, los brasileños Ronaldo y Roberto Carlos, más el español Raúl.
El Real Madrid mantiene en secreto quién será el patrocinador del acto de presentación, algo que no se sabrá hasta el mismo momento en el que comparezca Beckham.
Igualmente, se desconoce si al final acudirá Victoria, la mujer del jugador, quien suele acompañar a su marido a casi todos los actos.
Lo que sí parece seguro es que la camiseta que exhibirá Beckham ante los medios no tendrá dorsal, ya que el número dependerá finalmente del que dejen libres los jugadores blancos que no sigan en el club.
Se baraja como posibilidad más probable el "11", número actual del brasileño Ronaldo, quien podría llevar el próximo año el número "9" actualmente en poder del español Fernando Morientes, a quien el club pretende traspasar este verano.
