BUENOS AIRES.- Los secuestradores de Rubén Astrada, padre del ex internacional argentino Leonardo Astrada, pidieron un rescate de 800.000 pesos (unos 287.700 dólares), dijeron amigos de la familia del futbolista de River Plate.
En las últimas horas, Leonardo Astrada recibió una llamada telefónica en la que los secuestradores le dieron pruebas de que su padre está vivo, afirmaron las fuentes, citadas hoy por el diario "Clarín".
La familia Astrada sufre mucha angustia por haber recibido múltiples llamadas de personas que se aprovechan del caso para pedir dinero y al parecer no están vinculadas a los secuestradores, apuntaron.
Rubén Astrada, de 61 años, quien sufre hipertensión arterial, fue secuestrado alrededor de las 07.15 horas (10.15 GMT) del jueves pasado, a pocas calles de su casa, situada en la zona norte de los alrededores de Buenos Aires.
Varios testigos afirmaron que dos automóviles en los que viajaban entre cinco y siete personas fuertemente armadas embistieron al vehículo de Astrada para que se detuviera y se lo llevaron prisionero.
Fuentes policiales informaron de que los automóviles utilizados para apresar a Astrada eran robados y fueron abandonados en las cercanías de donde se cometió el secuestro.
Aunque la familia Astrada no ha hecho la denuncia del caso a la policía, el secuestro es investigado por agentes especializados en este tipo de delitos, que han recrudecido en el último año.
Astrada, de 33 años, el jugador que más títulos de campeón -doce- ha ganado en la historia del fútbol argentino, entre locales y sudamericanos, se ocupa personalmente de negociar con los secuestradores de su padre.
El secuestro del padre de Astrada es el cuarto que involucra en los últimos doce meses a familiares de jugadores de equipos de la liga argentina de primera división.
A mediados del año pasado, se pagaron fuertes sumas por el rescate de un hermano de Juan Román Riquelme, que por entonces jugaba en Boca Juniors y actualmente milita en el Barcelona español.
También se pagaron rescates por el secuestro de un hermano de Víctor Zapata, compañero de Astrada en River Plate, y por el padre de Diego y Gabriel Milito, quienes juegan en Racing Club e Independiente, respectivamente.