SANTIAGO.- Lazio siente la presión de su entrenador Roberto Mancini. El compañero de Marcelo Salas en el cuadro romano quiere a toda costa a los mediocampistas de Udinese, David Pizarro y Martin Jorgensen, por lo que se han reactivado oficialmente las negociaciones por las cartas del chileno y el danés.
La historia cumplirá dos meses, desde que el cuadro capitalino presentó su interés por contar con el porteño. Sin embargo, la negativa de Fabio Liverani para partir a Udine como "moneda de cambio" impidió que el acuerdo se formalizara hace dos semanas.
Pizarro no dramatizó, pese a que debió renunciar a un sueldo de 800 mil euros por temporada, y se mantuvo en la pretemporada con Udinese, cuadro clasificado para la Copa UEFA.
Sin embargo, los primeros enfrentamientos de preparación de Lazio y Juventus delataron la carencia de jugadores de las características de Pizarro y Jorgensen, por lo que ambos clubes volvieron a pujar por los pases.
Si bien el presidente de Udinese, Gianpaolo Pozzo descartó volver a negociar con Lazio, el "sí" del argentino Lucas Castromán a partir a Udine a cambio del brasileño Alberto reabrió las expectativas de conseguir un acuerdo. Esta malana llegaron los representantes de Pozzo a Roma para entrevistarse con los mandamases laciales Oreste Conquini y Luca Baraldi.
Pero no sólo del intercambio descrito. La prensa italiana asegura que para este miércoles está previsto un acercamiento entre Lazio y el representante de David Pizarro Jorge Czysterpiller, quien debiera cerrar el acuerdo antes del jueves, plazo máximo de inscripición de los planteles para ´los torneos internacionales (Lazio en la Liga de Campeones y Udinese en la Copa UEFA).
