SANTO DOMINGO.— Los atrasos en las obras y los percances en muchas instalaciones son ya cosa del pasado y los Juegos Panamericanos arrojan un balance sorpresivamente positivo.
A lo largo de las justas abundaron los cortes de luz, la negativa de los jueces a dirigir porque les debían dinero, el ingreso a los estadios de gente que no tenía entradas y otras dificultades.
La impresión generalizada, no obstante, es que esos problemas son comunes y que los juegos salieron bien. Muy bien, para algunos.
"Hace rato que no veo unos juegos tan buenos", aseguró el director de comunicaciones de la delegación estadounidense Bob Condron.
"Los deportistas están encantados con la villa y las instalaciones deportivas son de primera. Debo decir que todo ha salido muy bien", indicó.
Los elogios a la villa y a la mayoría de las instalaciones son unánimes. El alcalde de Río de Janeiro, sede de los Panamericanos del 2007, César Maia, declaró el domingo que una delegación brasileña observó el funcionamiento de la villa y reportó que fue "admirable, excelente", comparable a la de los Juegos Olímpicos de 1992 en Barcelona.
Y el presidente de la Organización Deportiva Panamericana, Mario Vázquez Raña, quien no ocultó su desazón por las demoras en las obras, muchas de las cuales fueron concluidas el mismo día del inicio de las competencias, reconoció que las instalaciones fueron de primera.
"Algunas de las instalaciones tuvieron un nivel que no vi ni siquiera en los juegos olímpicos", expresó el dirigente mexicano.
Vázquez Raña dijo que los problemas que hubo no fueron graves y los atribuyó a las demoras en las obras.
Su preocupación con los atrasos fue tal que vino con mucha antelación a Santo Domingo, inspeccionó personalmente las obras e hizo presión para que se acelerasen los trabajos en las semanas previas al inicio de las competencias.
Fue común ver gente dando los últimos toques a las instalaciones el día previo al comienzo de las justas.
Es previsible que la ODEPA tome medidas para asegurarse de que estas demoras no se repitan.
La delegación de Río, por de pronto, aseguró el domingo que las obras para los juegos del 2007 "estarán terminadas con seis meses de antelación", según dijo el secretario general del comité olímpico brasileño Carlos Osorio.
El presidente del comité organizador de los juegos de Santo Domingo, José Joaquín Puello, declaró que su país "dio un ejemplo, no solamente a lo interno de República Dominicana, sino también para todo el mundo. Ahora se hará más fácil a otros países pequeños el conseguir la sede de eventos grandes".
El gran interrogante al finalizar los juegos es qué sucederá con las instalaciones deportivas construidas para esta justa a un costo de decenas de millones de dólares. Resta por verse si los dominicanos lograrán mantener y darle uso a esas instalaciones, particularmente las de deportes que no son populares en la República Dominicana.