ROMA.- Fiorentina, que hace sólo un año había quebrado y caído a la Serie C-1 del fútbol italiano, fue reincorporada hoy al campeonato de Serie B de ese país.
La polémica decisión fue adoptada hoy por la Federación Italiana de Fútbol (FIGC) al aceptar un decreto gubernamental emitido el martes, que eleva de 20 a 24 la cantidad de equipos en la Serie B.
"Terminó una tragedia, esto es clamoroso, pero hay un decreto del gobierno que da dignidad a la decisión", afirmó el presidente de la Liga Amateur, Carlo Tavecchio, tras seis horas de reunión del Consejo Federal de la FIGC.
Los hinchas de Fiorentina salieron hoy a las calles a celebrar la noticia, lo mismo que los de Genoa, Catania y Salernitana, los otros tres clubes a los que la FIGC incorporó hoy al campeonato de la Serie B.
El decreto del gobierno del premier Silvio Berlusconi, quien a su vez es propietario del Milan, buscó poner fin a un caos jurídico que ponía en peligro el inicio del calcio, pero su sanción fue duramente criticada en ambientes deportivos.
"Si la política decide cuántos equipos deben jugar en la Serie B entonces mejor nos vamos todos a casa", había criticado poco antes Antonio Mattarese, vicepresidente de la liga de fútbol, que agrupa a los clubes.
El inicio del fútbol italiano estaba bajo peligro a raíz de sentencias de tribunales regionales de Italia que exigían a la FIGC que mantuviera en la Serie B a equipos que habían perdido la categoría.
La decisión salvó también la permanencia de Roma en Serie A, Napoli y Cosenza en la B y Spal en la C, los cuatro clubes objeto de otra investigación judicial por haber presentado avales falsos para jugar esta temporada.
El ex presidente de Cosenza, Paolo Fabiano Pagliuso, sin embargo, deberá seguir encarcelado por extorsión y daños a la FIGC, según un fallo emitido justamente hoy por la Suprema Corte de Italia.
La FIGC, que también está siendo investigada por la justicia ordinaria por su presunta participación en la maniobra, anunció hoy por su parte que, según su propia investigación, los clubes fueron "engañados" por financieras y brokers.
El decreto del gobierno y la decisión de la FIGC, sin embargo, ya recibieron amenazas de nuevas demandas judiciales, como el caso de Atalanta, que anunció hoy que recurrirá a los tribunales para exigir su retorno a la Serie A.
El reclamo de Atalanta fue apoyado inclusive por algunos miembros del gabinete de Berlusconi en desacuerdo con el decreto gubernamental y a quien el premier, según afirma hoy la prensa, debió pedirles que no actuaran "como si fuesen hinchas".
"Yo no defendí a Atalanta como hincha, sino porque si se decidió salvar el caos de la Serie B incorporando a cuatro equipos lo mismo debió hacerse con la A salvando a Atalanta", afirmó hoy el ministro de los italianos en el exterior, Mirko Tremaglia.
