MADRID.- El silencio es por ahora hermético por parte de los tres capitanes del equipo español de Copa Davis, pero en unas pocas horas entre la tarde y la medianoche del miércoles quedó claro que Feliciano López puede ir sacando boleto de avión para la final en Australia.
"Son los capitanes los que tienen que responder eso, está clarísimo", dijo algo molesto Alex Corretja cuando en su rueda de prensa junto a López recibió a bocajarro la pregunta inevitable: "¿Ya hay dobles para el equipo de la Davis?".
Corretja y López acababan de perder ante el bielorruso Max Mirnyi y el indio Mahesh Bhupathi por 7-6 en el tercer set un partido en el que dispusieron de un match point. Bhupathi/Mirnyi integran una de las dos mejores parejas del mundo, por lo que el resultado era muy importante, sobre todo si se tiene en cuenta que los españoles jamás habían entrenado juntos: "Nada. Entramos a la pista como dos bestias y nos dijimos, ’a jugar’".
Aunque hubo algo más que eso. López confesó en una entrevista publicada hoy por "ABC" que ya en agosto acordó con Corretja jugar dobles en 2004. "Luego llegó la propuesta de los capitanes y nos pareció muy bien adelantar la prueba e intentarlo".
Flanqueado por Costa, Corretja dijo en Málaga tras batir a Artentina que él y su compañero harían lo imposible por estar en Melbourne. "Hasta construir la pista. Esta pareja de dobles no puede dar más. Estamos haciendo todos los esfuerzos pese a ser singlistas, y le dedicamos muchas horas a pulir cosas para mejorar", dijo.
¿Sabía en ese momento Albert Costa, amigo y compañero de dobles de Corrteja hasta hoy, que tendría que buscarse compañero en 2004?
Corretja cuidó mucho sus palabras, pero sus frases fueron dando la impresión de que no hay mejor alternativa que elegir a él y a López para el dobles.
"La sensación tras este dobles es espectacular", fue la primera. "Jugar con Feliciano es como estar de picnic, saca bombas, y cuando saco yo, con su envergadura cubre mucha pista", prosiguió.
¿Alguna duda de cuál debe ser el dobles? Por si la hay, Corretja dejó otra frase: "Estoy sorprendido de cómo hemos jugado en nuestro primer partido. No entrenamos jamás, cero patatero, nunca, nada".
López, de 22 años y 35 del ránking, siente también que tiene la final de la Davis al alcance de la mano, y no sólo como doblista. "No descarto jugar los individuales en Australia", dijo más de una vez esta semana. "Pero por ahora estamos hablando de hipótesis, ni siquiera es seguro que me seleccionen", matizó.
Sin embargo, López cree que, al ser la final en hierba, el equipo no puede ser el mismo de las series ante Bélgica, Croacia y Argentina. "No existe nada parecido a esta superficie, es totalmente diferente a las demás".
Robredo, otra carta para jugar en hierba
Tommy Robredo, el gran ignorado en todas las especulaciones acerca del equipo para la final, coincide: "Si yo fuera el capitán elegiría un equipo para jugar en tierra y otro para otras superficies".
Número 17 del mundo, el catalán es, junto a López, el español de mejores resultados en césped. Pero nadie lo menciona como alternativa. "Creo que soy el español que más partidos ganó en hierba, pero son los capitanes los que deciden. Me encantaría jugar la Davis".
Sería un regreso para Robredo, tras haber integrado el equipo que perdió en los cuartos de final de 2001 ante Estados Unidos en Houston. Aquella vez Corretja logró un épico a inesperado triunfo sobre hierba ante Pete Sampras, pero al día siguiente dijo no estar en condiciones de jugar el dobles junto a Juan Balcells -campeón en 2000 y olvidado hoy-, dejándole su lugar a Robredo.
Con Juan Carlos Ferrero, Carlos Moyá, López y Robredo habría cuatro singlistas en el equipo, además de un dobles López/Robredo con buenos antecedentes en juveniles. Pero que se saque a Corretja del equipo es altamente improbable, todo lo contrario de lo que sucede con Costa, que en las últimas horas dejó traslucir su enojo.
"Está claro que no estoy contento. Pero no voy a criticar a nadie, cada uno tiene su opinión. Feliciano es muy bueno en césped. Desde mi punto de vista yo estoy en condiciones de jugar el dobles con Corretja", dijo Costa, al que Corretja definió como "amigo y compañero hasta la muerte", aclarando antes que "las comparaciones son odiosas".
"Estoy acostumbrado a esto. Cuando era número ocho del mundo en la Davis sólo jugaba dobles", continuó Costa, que destacó que la "experiencia" es lo que ayuda a Corretja tras una temporada en la que cayó al puesto 127 del ránking.
¿Podría resquebrajarse la amistad "hasta la muerte" de Corretja y Costa -que viven en San Cugat casi pared con pared- si se rompe el dobles? La situación no es sencilla para nadie, tampoco para Josep Perlas, uno de los capitanes de la Davis, entrenador de Moyá en 2000 y de Costa ahora. Moyá cortó la relación con Perlas tras quedarse fuera de la final de la Davis en Barcelona.
Y mientras todo indica que Corretja y López llegarán a Australia con escasa práctica en torneos, Costa ya está en la segunda ronda del dobles en Madrid junto al holandés Martin Verkerk. Mañana enfrentarán a una pareja de gran nivel, la que integran el sueco Jonas Bjorkman y el australiano Todd Woodbridge. ¿Qué sucedería si Costa gana ante el doblista titular de Australia?