MONTEVIDEO.- El defensor uruguayo de Juventus de Italia, Paolo Montero, se declaró dispuesto ahora a retornar a la selección de su país, tras haberse marginado voluntariamente al finalizar el Mundial de Japón-Corea 2002.
"Renuncié por problemas extrafutbolísticos, pero la cabeza y el corazón están puestos en la selección. Me gustaría volver, uno no puede desprenderse de los sentimientos", señaló el zaguero en declaraciones telefónicas a la prensa de Montevideo.
Montero, de 32 años, integró el combinado de Uruguay desde 1992, pero al terminar el último Mundial dijo públicamente que los problemas internos le habían superado y que, por otra parte, era hora de "darle espacio a los jóvenes".
El actual entrenador de la selección uruguaya, Juan Ramón Carrasco, siempre respetó esa decisión del futbolista, por lo que no fue convocado para la actual eliminatoria del Mundial de Alemania 2006.
"Paolo puede volver cuando él lo decida, ya expliqué que no es un tema mío, sino que pasa por una decisión del jugador que yo respeto", dijo Carrasco antes de conocerse la nueva postura del zaguero uruguayo.
"Si vuelve le ponemos la alfombra", añadió el entrenador, que siempre ubico a Montero entre los futbolistas "de clase A", junto a Álvaro Recoba (Inter, Italia) y Diego Forlán (Manchester, Inglaterra), plenamente sumados al actual proceso.
