BUENOS AIRES.- El delantero Carlos Tévez fue habilitado anoche para jugar por el Boca Juniors argentino la final de la Copa Intercontinental ante el AC Milan italiano, el próximo 14 de diciembre en Yokohama.
El comité ejecutivo de la Asociación del Fútbol Argentino (AFA) tomó esa determinación en una reunión en la que dieciocho dirigentes avalaron el pedido del Boca en ese sentido, tras un conflicto que mantuvo el interrogante sobre la participación de Tévez en ese partido.
Los dirigentes del fútbol argentino habían prohibido al juvenil jugar por Boca ante Milan debido a que Tévez renunció a disputar con la selección nacional el Mundial Sub 20 que se lleva a cabo en los Emiratos Arabes.
Según un acuerdo firmado hace unos años por los dirigentes, un futbolista que renuncia o no es cedido por su club a la selección argentina no puede jugar por su equipo hasta que el conjunto nacional concluya su participación en el torneo para el que fue convocado.
Ante esta situación, la justicia ordinaria argentina concedió un recurso de amparo pedido por los abogados de Tévez para que el futbolista pudiera jugar con su equipo en Japón, lo que irritó a las autoridades de la AFA y en especial al suizo Joseph Blatter, presidente de la FIFA.
Blatter, incluso, dijo la semana pasada que si el delantero no retiraba su acción judicial terminaría "jugando en los juzgados o en la luna".
El viernes pasado, tras celebrar con sus compañeros de Boca la obtención del título de campeón de la liga argentina, Tévez retiró su petición de amparo, lo cual destrabó definitivamente el conflicto.
"Quiero agradecer al resto de los clubes por la buena predisposición", comentó a los periodistas el vicepresidente boquense, Pedro Pompilio, tras la reunión celebrada hoy en la sede de la AFA.
"Hubo errores (en el manejo de la situación) y Boca los asumió", añadió el dirigente.
Por el contrario, el presidente de San Lorenzo, Alberto Guil, consideró "una vergüenza" que Tévez fuera habilitado para jugar por su equipo.
En idéntico sentido se manifestó el vicepresidente del River, Julio Macchi, quien comentó que con la habilitación del jugador, de 19 años, "se quebrantó abiertamente el reglamento".
Además de los representantes de San Lorenzo y River, también los dirigentes del Lanús, Chacarita Juniors y Estudiantes se opusieron a que Tévez quedara habilitado.