BUENOS AIRES.- River Plate viajó hoy a la ciudad chilena de Iquique, donde se entrenará antes de trasladarse a Perú para jugar el viernes con el Cienciano la vuelta de la final de la Copa Sudamericana, más optimista que la semana pasada, cuando igualó en su estadio (3-3) en el choque de ida.
Mientras en Buenos Aires se asegura que este será el último partido del chileno Manuel Pellegrini en el River, gane o pierda, el entrenador sólo se ha referido a las posibilidades que tiene su equipo de ganar el trofeo y a las "ganas" de los jugadores por alcanzar ese objetivo.
"Lo futbolístico y lo anímico me permite creer en una victoria", dijo Pellegrini, quien se ha negado sistemáticamente a responder preguntas sobre su situación en el club.
Fuentes riverplatenses dijeron hoy que el ex futbolista Leonardo Astrada sustituirá al adiestrador chileno en enero y que las conjeturas que la prensa deportiva de Buenos Aires ha hecho en ese sentido en las últimas horas "tienen asidero".
Astrada, que colgó las botas este año, y el ex defensa Hernán Díaz, se reunieron el martes con miembros de la directiva de River para elaborar un plan de trabajo de cara al torneo Clausura y la Copa Libertadores 2004.
Pero los futbolistas parecen ajenos a ese asunto y sólo quieren ganar la Sudamericana. "Jugamos en un equipo con historia y tenemos que traer esa Copa", afirmó el media punta Marcelo Gallardo, reincorporado a mediados de año por el River tras jugar varias temporadas en el Mónaco.
El mediocampista Javier Mascherano, que estuvo unas pocas horas en Buenos Aires tras su regreso desde los Emiratos Arabes, donde jugó con Argentina el Mundial Sub 20, aseguró que la altitud de Arequipa (2.400 metros) "no es algo que se sienta tanto" y que pueda perjudicar al equipo argentino.
"Ya jugué en esa ciudad (en el Sudamericano Sub 17 de 2001) y no es tan complicado", indicó.
Mascherano negó que la conquista de la Copa Intercontinental por parte de Boca Juniors sea "una presión extra" para el plantel "millonario". "Nosotros jugamos para River y para darle una alegría a la gente, nada más", afirmó.
Pellegrini coincidió con el juvenil futbolista y afirmó que "el gran año del Boca Juniors no representa "una carga" adicional para su equipo en esta instancia decisiva con el Cienciano.
El centrocampista Luis González dijo que "hay razones para confiar en River en esta final, por la calidad de sus jugadores y por la historia del equipo" y señaló como "muy positiva" la alineación de varios jugadores que no fueron titulares en el partido de ida, como Horacio Ameli, Mascherano y el chileno Marcelo Salas.
No obstante, el equipo ha viajado sin que Pellegrini confirmara la alineación de Salas, que en el caso de ir al banquillo -como en el encuentro de ida- dejará su puesto al media punta Daniel Montenegro.
Los jugadores del equipo argentino han insistido en los últimos días en resaltar las posibilidades que tienen de ganar el torneo, casi sin referirse al rival, que en Buenos Aires dio una demostración de entereza, carácter, orden táctico y virtudes técnicas individuales que no pasaron inadvertidas.
En Iquique, River Plate descansará esta noche y se entrenará mañana, jueves, antes de viajar a Arequipa, donde el Cienciano espera alcanzar el viernes el primer título internacional ganado por un equipo peruano en la historia.
De no mediar imprevistos, el equipo se alineará con Franco Costanzo; Oscar Ahumada, Horacio Ameli, Eduardo Tuzzio, Ricardo Rojas; Eduardo Coudet, Javier Mascherano, Luis González, Marcelo Gallardo; Maximiliano López y Marcelo Salas (Daniel Montenegro).