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Deportes Arica: Luchando para no morir

El sistema de torneo tiene encerrado al club ariqueño, que en un escenario insólito incluso podría ascender y descender... a la vez. Si sucede lo último, tienen claro su destino: desaparecer.

18 de Febrero de 2005 | 12:13 | Matías Gazitúa M., El Mercurio en Internet

El enredo de la "B"
El torneo de segunda división se inicia el 26 de febrero y contará con tres fases en las que sólo doce equipos buscarán los tan ansiados pasajes a la división de honor del fútbol nacional.

A ellos se le sumarán San Luis y Ñublense, cuadros que actuarán como invitados y, por ende, no tendrán chances de ascender.

La etapa inicial contará con tres zonas, dos de cinco y una de cuatro elencos, en las que los equipos jugarán todos contra todos.

La zona norte está conformada por Arica, Antofagasta, Ovalle y Copiapó; la centro por Unión La Calera, San Luis, Magallanes, Santiago Morning, y O'Higgins; mientras que la sur contará con Naval, Lota, Fernández Vial, Ñublense y Osorno.

Respetando el puntaje que sumen en esa fase preliminar, los equipos se dividirán en dos grupos de siete, en que los que los tres primeros clasificarán a la liguilla final.

El campeón y el vicecampeón de ese hexagonal tendrán el privilegio de subir a la "A", mientras que el tercero y el cuarto jugarán la liguilla de promoción
SANTIAGO.- "Arica, siempre Arica, siempre Arica, ¡hasta morir!", fue el cántico más escuchado la noche del miércoles en el Estadio Carlos Dittborn, cuando cerca de diez mil personas afinaron sus voces y entonaron el famoso himno de la ciudad nortina.

El evento lo ameritaba. Club de Deportes Arica presentaba sus refuerzos en la tradicional "Noche Celeste” y disputaba un partido amistoso con Unión Española. Y aunque el conjunto celeste salió derrotado por 3-2, el resultado importó poco. La parcialidad ariqueña tiene la mente puesta en otra cosa: este año el equipo debe subir sí o sí a primera división para mantenerse en el fútbol rentado.

Es que las discretas campañas anteriores le están pasando la cuenta al elenco nortino, que ahora necesita de manera imperiosa finalizar la temporada entre los dos primeros lugares del torneo de Primera B. O si no, la regencia anunció que el club desaparecerá, ya que no existen los recursos necesarios para financiar una estadía en Tercera División.

Pero no la tendrán fácil en la primera región. Deportes Arica figura penúltimo en la tabla acumulada de 2003 y 2004 -años en los que no hubo descenso directo- con 12,7 puntos, a 2,4 unidades de la salvación. Para acortar la diferencia, el conjunto celeste deberá conseguir una buena cantidad de positivos en la primera y segunda fase del torneo de Primera B, para luego ir por el ascenso en la liguilla final (ver recuadro).

Curiosamente, se puede dar el caso de que el equipo no consiga el objetivo del ascenso directo, pero que sí llegue a disputar la liguilla de promoción. Ahí tendría posibilidades ciertas de subir a primera sin obtener las unidades necesarias para mantenerse en segunda. En otras palabras, ascendería y descendería a la vez. Otra joya más del fútbol chileno.

Rómulo Ruiz, vicepresidente del CDA, asegura que "los cálculos están hechos", pero se muestra confundido a la hora de enarbolar una explicación. "Hay un crédito, digámoslo así, que pondera los puntos. Yo no sé si es el 2.6 o el 1.6. Entonces, nosotros al ganar la primera rueda entraríamos a la segunda fase con una cantidad ‘x’ de puntos, recuperando en parte las unidades de la etapa anterior. Pero tiene razón, no nos sirve llegar terceros o cuartos", confiesa.

En la Asociación Nacional de Fútbol (ANFP) tampoco tienen contemplada esta insólita situación, aunque se espera que sea estudiada en un futuro concejo de presidentes. Los directivos nacionales ya tenían tarea pendiente con el tema del descenso en la Primera A, debido a que no habían contemplado en los puntajes acumulados que Melipilla y Concepción tendrían más partidos que los que ascendieron en años previos y, por lo tanto, tienen mayores opciones de sumar puntos.

"Vencer o Vencer"

El cuadro celeste se fundó el 14 de Febrero de 1978 luego de la fusión entre los equipos Arica Portuario y Norte Arica, transformándose en el exclusivo equipo de la ciudad. Este año celebraron el 27° aniversario de la institución y los directivos se pusieron manos a la obra para concretar el tan ansiado retorno a la división de honor del balompié chileno.

Para ello, conformaron una planilla avaluada en cerca de 18 millones de pesos, gracias al respaldo de los empresarios de la zona agrupados en el proyecto "Vencer o Vencer" y se hicieron con los servicios del estratega Sergio Nichiporuk, un experto si se trata de ascensos.

Ruiz se muestra ilusionado con el proyecto y asegura que "se ha conformado una directiva que se trazó como objetivo principal salvar a Deportes Arica. Porque si no salimos campeones o vicecampeones, el club desaparece del fútbol profesional. Y usted sabe que irse a Tercera, es igual que desaparecer".

Junto con Nichiporuk, llegaron al conjunto celeste experimentados jugadores como el arquero Erwin Concha, el volante Héctor Pericas, y los atacantes Fabián Muñoz y Marcelo Suárez. Sin embargo, destaca la figura del ex defensor de Puerto Montt y el Irapuato de México, Manuel López, quien asegura que llevar a Arica a primera debe ser unos de los desafíos más importantes de su carrera.

"Nos gusta jugar con la presión, de que hay algo en carrera, y si estamos acá es por eso. Si fuimos los elegidos de don Sergio (Nichiporuk) para estar acá, es porque él cree mucho en nuestras condiciones y en que somos capaces de sacar adelante la tarea fijada", comentó el futbolista a La Estrella de Arica.

Nunca faltan

Pero no todos se han tomado con seriedad la ardua tarea que les espera a contar del 26 de febrero, fecha en que comienza el campeonato de la Primera B, puesto que un par de jugadores fueron despedidos del club debido a una intensa velada en que el alcohol hizo de las suyas y generó una gresca de proporciones con la dueña de la residencial en la que vivían.

El incidente desató las iras del entrenador, que decidió la salida inmediata del defensa Marcos Muñoz y el volante Jorge Gálvez. “No entendieron el mensaje de que en Arica existe una angustia, en la que han pasado montones de entrenadores en estos 19 años en los que se está en la Primera B y han querido regresar a primera y por distintos motivos no se ha podido”, explicó.

Pero el mal rato no hizo mella en las esperanzas del estratega celeste, quien dice estar tranquilo a pesar del difícil transitar que le espera y realiza un llamado a los ariqueños para que apoyen al equipo: “en esa tarea tenemos que estar unidos jugadores, cuerpo técnico, dirigentes, hinchada, ya que es sólo un equipo el que existe en la ciudad y es obvio que tenemos que estar todos juntos en esto”.
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