MILAN.- El calcio deberá acordar un límite al suministro de fármacos lícitos, afirmó el presidente del Sindicato de Futbolistas Italianos (AIC), Sergio Campana, quien agregó que los jugadores "no son culpables, sino víctimas" en ese tema.
"Es hora de encontrar un acuerdo para establecer los límites en el suministro de fármacos lícitos en ausencia de patología", dijo Campana, en la asamblea anual de la AIC que se celebró en Milán.
Campana afirmó que el capitán del seleccionado italiano y zaguero de Juventus, Fabio Cannavaro, "ni siquiera debe ser condenado moralmente", tras la difusión por TV de un polémico y viejo video en el que se autoinyecta un estimulante cardíaco.
"Pero tenemos que reflexionar, porque tal vez dentro de veinte años sepamos que estábamos consumiendo fármacos dañosos para nuestra salud", advirtió el centrocampista de la Roma, Damiano Tommasi, presente en la asamblea.
El arquero Matteo Guardalben (Palermo) admitió que es de él una voz que aparece en el video de Cannavaro, antes de una final de Copa UEFA de 1999, cuando ambos eran jugadores de Parma.
"Es mi voz la que dice '¿te puedo pinchar yo también?', pero está claro que estábamos bromeando", dijo Guardalben, quien reiteró que Cannavaro no se estaba dopando y que el fármaco que se inyectaba estaba autorizado por los reglamentos.
Cannavaro también fue "absuelto" hoy por el cardenal Fiorenzo Angelini, en el habitual programa deportivo de Radio Vaticana, en el que el sacerdote afirmó que "todo esto fue un escándalo forzado y espectacularizado por la TV".
El Neotón que se inyectó Cannavaro en el video "es un integrador útil a base de creatina que no tiene nada que ver con la droga o el doping", expresó a su vez Umberto Tirelli, del centro oncológico de Aviano y uno de los pocos médicos italianos especializados en el síndrome de cansancio crónico.
"Trabajo con muchísimas personas, entre ellas atletas de alto nivel que sufren surmenage y el Neotón no tiene nada que ver con la eritropoietina, los anabólicos o la cocaína. Sirve para recuperar más velozmente la fuerza, especialmente en períodos de cansancio. Lo prescribo para cirujanos, jueces y periodistas, ¿por qué no debería dárselo a los atletas?", siguió Tirelli.
Tirelli se preguntó si acaso se dice algo sobre los veinte cigarrillos diarios que consume el DT de Lecce, el checo Zdenek Zeman, el principal denunciante del doping en el calcio.
También Michelle Uva, uno de los principales dirigentes de Parma en aquellos años, defendió a Cannavaro, aunque admitió que el fútbol "se convirtió en uno de los principales negocios con una facturación de 6.000 millones de euros por año" y que si se utilizan menos fármacos, también "habrá menos partidos y menos dinero".
