SANTIAGO.- El primer balde de agua fría, tras la eliminación definitiva de la selección chilena de las eliminatorias para Alemania 2006, lo dio el volante David Pizarro, quien anunció su retiro del combinado rojo.
El mediocampista del Inter de Milán dijo que no era una decisión "en caliente" tras el empate ante Ecuador, y la justificó porque necesita tiempo para estar con sus hijos.
"Esta eliminatoria no tuve la confianza y por ahí estuve fuera de algunas convocatorias, pero estoy tranquilo. La idea es ahora preocuparme nada más que de mi señora y mis hijos", comenzó diciendo el esta noche capitán de la "Roja".
Y agregó que "no es una decisión en caliente, es una decisión que hablé con algunos compañeros, así que es una decisión que la tomé, la hablé con mi familia y ya está. La tomé y lamentablemente no terminó como quería".
Pizarro se vio en todo momento tranquilo, sereno. Y ante la consulta de por qué se iba si todavía era joven, señaló que "tengo dos hijos y me estoy perdiendo una etapa muy linda. Entonces, ya cuando te empiezan a reclamar tus hijos, la piensas porque yo fui formado en una familia que siempre estuvieron mis padres detrás... No me quiero perder esta etapa sobre todo porque luego crecen y se van".
Ante una posible revisión de su decisión, Pizarro añadió que "no creo que me reformule algo porque siempre di lo mejor de mí hacia la selección y me voy con lo positivo que fue mi paso por la selección, haber obtenido una medalla de bronce (en los Juegos Olímpicos de Sydney)".