ZURICH.- El ex arquero internacional paraguayo José Luis Chilavert quiere ser técnico de la selección de su país después del Mundial de Alemania 2006, al que la "albirroja" se clasificó de la mano del uruguayo Aníbal Ruiz.
Así lo afirmó el propio ex capitán del seleccionado paraguayo en una entrevista al sitio oficial de la FIFA, en la que advierte que también está dispuesto a trabajar como manager y hasta como presidente de la Asociación Paraguaya de Fútbol.
Chilavert dijo que pretende emular al alemán Franz Beckenbauer y aseguró que en la actualidad "no hay figuras explosivas" (como él cuando estaba en actividad) y que "todo es muy light".
"Eso pasa, por ejemplo, en el fútbol argentino, donde hay varios equipos a los que les falta un líder y un referente", explicó Chilavert, quien aseguró que desde que se retiró extraña el clima de los vestuarios.
"Mi ex compañeros en Vélez Sarsfield, cuando los visito, me hacen sentir como en casa", afirmó Chilavert, baluarte en la época más gloriosa del club argentino, conducido por entonces por Carlos Bianchi.
Chilavert, quien disputó los Mundiales de Francia 98 y Corea-Japón 2002 y es uno de los máximos referentes en la historia del fútbol paraguayo, afirmó que lo que más lamenta es "no haber podido jugar en el fútbol de Inglaterra".
"Se adapta mucho a mis características, con esos centros a los que habría despejado a puñetazos y con la posibilidad de ejecutar los tiros libres desde larga distancia", explicó Chilavert, un especialista en remates con pelota parada y autor de 62 goles en partidos oficiales a lo largo de su carrera.
Retirado en 2004, tras su paso por el uruguayo Peñarol, Chilavert debutó en primera división en 1980 con Sportivo Luqueño y jugó en Guaraní, San Lorenzo de Argentina, Zaragoza, Vélez y Racing de Estrasburgo.
Entre sus logros figuran cuatro títulos locales con Vélez (1993, 1995, 1996 y 1998), equipo con el que conquistó también la Copa Libertadores y la Intercontinental en 1994 y la Recopa Sudamericana, dos años más tarde.
En su currículum figuran también algunos momentos no tan gratos, producto de su fuerte personalidad, como el escupitajo que le "regaló" al brasileño Roberto Carlos tras el partido que su selección perdió 0-2 en las eliminatorias al Mundial 2002.
"No me arrepiento de nada, ni siquiera de aquel salivazo a Roberto Carlos, que me había estado insultando todo el partido. Eso sí, sirvió para agrandar en todo el mundo mi fama de malo", comentó.
Para el ex arquero paraguayo, los brasileños Ronaldo y Ronaldinho y el atacante italiano Christian Vieri son los mejores en la actualidad, aunque también destacó a sus compatriotas Nelson Haedo, Julio Dos Santos y Santiago Salcedo ("Juega en Japón y por eso no es tenido en cuenta por el actual equipo técnico de la selección").
Antes de despedirse, Chilavert afirmó: "Quiero ser recordado como un arquero que hizo todo en el mundo del fútbol, porque yo gané todo, excepto el Mundial con Paraguay, y fue distinguido tres veces como el mejor jugador del mundo por la Federación de Historia y Estadísticas del Fútbol".
