RÍO DE JANEIRO.- La tenista suiza Martina Hingis no espera grandes logros en su regreso al circuito profesional después de su retirada en 2002, y la rusa Anna Kournikova, su adversaria en un esperado partido amistoso este sábado en Río de Janeiro, admitió hoy entre risas que teme llevarse una auténtica zurra.
"Creo que voy a tomar una zurra. Ella (Hingis) está entrenándose mucho más que yo", dijo Kournikova en una conferencia de prensa al lado de la suiza, que reinó en el mundo durante 209 semanas y acaparó cuarenta títulos en individual y 36 de dobles antes de retirarse, hace tres años, por una lesión en el tobillo.
Kournikova, que no disputa un partido oficial desde 2003, cuando una serie de lesiones la determinaron a colgar la raqueta y abandonar las canchas, respondió con un determinado no a la pregunta de si ensayaría un regreso al tenis.
"La WTA ya está muy bien servida con la vuelta de Martina", dijo con una enorme sonrisa la bella rusa, de 24 años.
Hingis aprovechó su primer día en río de Janeiro para correr por la avenida costera de la playa de Copacabana, en cuya arena se ha montado una cancha especial para el partido que cerrará un torneo amistoso de tenis, en el que tomaron parte ocho figuras masculinas del circuito mundial.
Sobre su nueva etapa en el tenis, la joven de 25 años dijo que la encara en el comienzo sin mayores expectativas de ascender en la clasificación general, "por lo menos hasta el segundo torneo".
Risas, bromas, buen humor y mucha cordialidad marcaron la comparecencia ante la prensa de la tenista suiza y ex jugadora rusa.
Al ser informadas de que Copacabana, la playa turística del sur de Río de Janeiro es conocida como la "Princesinha do mar" (Princesita del mar), Kournikova evitó polémicas al responder quién de las dos se quedaría con el título oficioso este sábado.
"Yo soy la pequeña princesa y ella (Martina) es la grande", bromeó Kournikova.
