PARÍS.- Max Mosley, titular de la Federación Internacional de Automovilismo (FIA), afirmó que no teme a la creación de un Mundial paralelo a la Fórmula Uno, porque la categoría tiene una "base sólida" con Ferrari, Williams y otras escuadras.
Renault, Mercedes, BMW, Honda y Toyota, que integran la Grand Prix Worldchampion Association (GPWA), amenazan con crear una categoría similar a la F-1 en 2008, cuando termine la vigencia del llamado "Pacto de la Concordia".
"Eso no representa una amenaza. Ferrari, Williams, Midland y los dos equipos que son propiedad de Red Bull mantienen su fidelidad a la FIA. Tenemos una base sólida para afrontar el futuro con tranquilidad", afirmó Mosley.
En una entrevista que publicó el diario deportivo parisino L'Equipe, el dirigente dijo que "tres o cuatro" de los equipos rebeldes "están llamando ya a la puerta y tienen la intención de sumarse a nosotros".
"No revelo el nombre, pero cualquiera puede imaginárselo, si quieren hacerlo serán bienvenidos. Caso contrario que hagan -si pueden- ese tan mentado campeonato paralelo", desafió Mosley.
El dirigente, reelegido por unanimidad al frente de la FIA semanas atrás, elogió a los jefes de equipos de las escudería "legalistas", en particular a Jean Todt (Ferrari) y Christian Horner (Red Bull Racing).
"Es un placer trabajar con gente así, experimentada y muy profesional, que pone el interés general por encima del particular, como se demostró cuando hubo que aprobar las nuevas reglas técnicas de la F-1", concluyó Mosley.
El dirigente también vio con agrado el fichaje del campeón español Fernando Alonso, actualmente en Renault, por McLaren para 2007 y aprueba que se haya anunciado con un año de antelación.
"Su traspaso será algo interesante", comentó Mosley en otra entrevista publicada por el diario italiano La Gazzetta dello Sport. "Desde el punto de vista de lo ético, está bien hecho", añadió, en contraste con Berni Ecclestone, el dueño de los derechos comerciales de la categoría, que cuestionó el procedimiento.
