BELGRADO.- El desequilibrado padre de la tenista serbia Jelena Dokic amenazó con "secuestrar" a su hija o "matar a un australiano", alterado por el regreso de la muchacha a Australia.
Damir Dokic, protagonista de diversos escándalos en los últimos años, afirmó incluso que "había pensado dejar caer una bomba nuclear sobre Sydney", según declaraciones formuladas al periódico serbio Kurir.
También reconoció que había buscado el apoyo de los políticos de su país para realizar el "secuestro" de su hija y llevarla consigo.
"Otra cosa que he pensado fue matar a un australiano para vengarme, pero no ganaría nada con eso", dijo Dokic, con espeluznante desparpajo.
Otros episodios de descontrol
Damir, que no ha hablado con su hija en los últimos dos años, ya tuvo problemas en ediciones pasadas del Abierto de Australia y fue expulsado del Abierto de Estados Unidos en 2000 por agredir a los mozos del bar.
Cuando su hija llegó a las semifinales de Wimbledon, en 2001, rompió el teléfono de un periodista y llamó "nazis a todos los ingleses, menos a la reina".
"Australia, con la ayuda de Croacia y El Vaticano, han lavado el cerebro a mi hija. Australia es una nación corrupta y me vengaré", enfatizó Damir.
La tenista, que se entrena en Australia, se tomó con resignación el nuevo desatino de su progenitor. "Esta reacción es otra desafortunada distracción en mi regreso a Australia y al tenis de alta competición. Pasé gran parte de mi vida intentando superar hechos como éste", dijo la jugadora a periodistas australianos.
La Asociación de Tenistas (WTA) mostró hoy su preocupación por las declaraciones del padre de la jugadora y subrayó la decisión de apoyar a Jelena "en todo cuanto fuera necesario" para favorecer su regreso a la alta competición.