RANCAGUA.- El primer paso, aquel que le costó 24 años poder repetir al tenis chileno, ya está dado. Con el equipo nacional instalado en los cuartos de final de Copa Davis, ahora la concentración se centrará en la próxima valla que, si se cumplen los pronósticos, será Estados Unidos.
"Esperemos que gane Rumania", afirmó Hans Gildemeister tras la decisiva victoria en el dobles, intentando prender una luz de esperanza para evitar el choque ante los estadounidenses, que debido a los enfrentamientos previos sería con toda seguridad en calidad de visitante.
Asumiendo a Estados Unidos como el más seguro próximo rival, Gildemeister agregó que no es imposible pensar en una nueva victoria chilena. “Nicolás y Fernando siempre nos sorprenden. Lo hicieron ganándole 3-0 a Eslovaquia, lo hicieron en los Juegos Olímpicos, ganando tres medallas en menos de 48 horas. Y capaz que ahora nos sorprendan ganándole a Estados Unidos, pero para eso tenemos que prepararnos”, afirmó el capitán.
“Con Nicolás y Fernando le podemos jugar de igual a igual a cualquier país. Si nos toca con Estados Unidos, no vamos a tener la obligación de ganar y eso es nos ayuda muchísimo”, agregó Gildemeister, quien además dijo que será muy importante conocer qué cancha elegirán los norteamericanos: pasto o cemento.
Nicolás Massú también respondió con confianza respecto al futuro desafío, reconociendo es sí que “la localía es muy importante. Si Estados Unidos viniera para acá, nosotros seríamos los favoritos”. El viñamarino afirmó que “nosotros tenemos un equipo para jugar en cualquier cancha. A lo mejor en pasto tenemos menos experiencia, pero hay equipo para ir a jugar de igual a igual”.
La segunda raqueta nacional, que sólo decidirá el lunes si participa en el torneo ATP de Buenos Aires, subrayó que un desafío como el que habría con Estados Unidos le da una motivación extra. “Ojalá vayan con el mejor equipo, que esté Roddick, que esté Agassi. Ojalá sea en cemento y contra el mejor equipo”, declaró.
Para Fernando González, un desafío como este se daría en un momento ideal en el que ambos tenistas reconocen que su tenis ha crecido. “Con Nicolás maduramos mucho como tenistas, empezamos a jugar cada vez mejor y además cuando jugamos por el país nuestro nivel sube. Vamos a ir por más, queremos ir por más y este equipo puede”, manifestó.
El mejor ranqueado chileno no disputará ningún torneo la próxima semana, aunque también puso en duda su participación en el torneo ATP de Memphis, que disputaría a continuación. “Está en duda, no quiero apurarme en tomar una decisión”, aclaró.
Para los que ya se ilusionan con ver a los chilenos disputando nuevamente una definición por la preciada Ensaladera, los propios jugadores remarcaron que es posible, pero que aún existe una importante distancia por recorrer. “Con el Nico le hemos ganado a los mejores jugadores del mundo en singles y en dobles. Se puede, pero obviamente la Copa Davis cambia mucho de local y de visita”, aseguró González.
Pero la Copa Davis para Chile todavía continúa el domingo y Gildemeister aún no decide quiénes jugarán los últimos dos partidos individuales, una decisión que tomará una vez que converse con los propios jugadores y el equipo médico. En todo caso, dados los problemas físicos que presentaron González y Massú durante la semana, es probable que Paul Capdeville y Adrián García tengan su chance en los últimos dos partidos de singles.