DUESSELDORF.- Duesseldorf se convertirá a partir de mañana y durante dos intensas jornadas en la sede de una "cumbre" del fútbol mundial, con varios de los 32 entrenadores que competirán en la Copa del Mundo intercambiando información y poniéndose al tanto de los últimos detalles.
Estarán el brasileño Carlos Alberto Parreira, el italiano Marcello Lippi y el holandés Marco van Basten, pero faltarán entrenadores de equipos clave, como el alemán Jurgen Klinsmann o el argentino José Pekerman.
La inasistencia de Pekerman no sorprendió en exceso a los organizadores, ya que el argentino suele evadirse de compromisos de este tipo: ya en diciembre fue el único de los 32 entrenadores de Alemania 2006 ausente en el sorteo.
La ausencia de Klinsmann en el "workshop" fue en cambio duramente criticada por los entrenadores de la Bundesliga alemana, especialmente después de la derrota por 4-1 del equipo alemán frente a Italia el miércoles en Florencia.
Pero el copresidente de la Federación Alemana de Fútbol (DFB), Theo Zwanziger, defendió al técnico alemán. “Klinsmann no es nuestro embajador para asuntos de sociedad”, ironizó.
También el manager del equipo nacional alemán, Oliver Bierhoff salió en defensa de Klinsmann, señalando que "la presencia del entrenador es superflua cuando se trata de cuestiones como la hora de salida de los autobuses o en qué sitio los patrocinadores deben colocar sus carteles publicitarios".
Bierhoff, quien asistirá al taller en compañía de Joachim Loew, asistente de Klinsmann, no deja de tener razón, porque en Duesseldorf se tratarán sobre todo cuestiones de tipo administrativo, con el objetivo de familiarizar a los representantes de los equipos participantes con el desarrollo del torneo que comenzará el 9 de junio.
Pero los adiestradores asistentes, entre ellos también el francés Raymond Domenech y el sueco Sven-Goran Eriksson, entrenador de los ingleses, también hablarán sobre la posibilidad de prolongar el plazo para la presentación de la lista definitiva de jugadores.
La iniciativa partió precisamente de Klinsmann, Eriksson, Lippi y Parreira, y su deseo es que la FIFA prolongue el plazo para presentación de las listas de buena fe con los 23 nombres más allá del 15 de mayo.
En el caso concreto de Klinsmann, el alemán desea aprovechar las últimas concentraciones de la selección en Cerdeña y Ginebra para poder observar mejor a sus jugadores y reaccionar a eventuales lesiones o falta de forma.
El presidente de la FIFA, Joseph Blatter, no descartó acceder al deseo de los entrenadores.
Junto a los técnicos, también los médicos ajustarán en Duesseldorf los últimos detalles organizativos relacionados con los exámenes a que serán sometidos los jugadores antes del torneo, prevención de lesiones y controles antidopaje.