MELBOURNE.- El nuevo motor funcionó mejor de lo esperado para BMW Sauber. Después de que el equipo alemán de Fórmula 1 pusiera como fecha a la solución de sus problemas la carrera de Nuerburgring dentro de un mes, hoy en el Gran Premio de Australia se sorprendió con un cuarto y un sexto puesto.
Nick Heidfeld fue cuarto en la carrera que ganó hoy Fernando Alonso, mientras que el ex campeón del mundo Jacques Villeneuve fue sexto. "Todo ha ido de manera óptima", dijo sorprendido el director deportivo de BMW, Mario Theissen. "Los coches fueron rápidos y los pilotos lo hicieron bien". Por primera vez los dos pilotos se metían en los puntos en la misma carrera.
"Para un nuevo equipo es fantástico lograr puntos con los dos coches", dijo Heidfeld, que aprovechó las numerosas incidencias de otros pilotos para lograr una cuarta posición. "Estamos orgullosos", reconoció Theissen. "Hemos logrado posiciones que no esperábamos. Es un gran éxito".
Y es que tras tres cambios de motor ya antes del tercer Gran Premio nadie esperaba que todo funcionara tan bien hoy. El equipo alemán descubrió el causante de los daños en el propulsor: un elemento defectuoso del cigüeñal. La desviación es cuestión de milímetros, pero las consecuencias son fatales.
En San Marino el 23 de abril los dos BMW deberán aguantar con el motor utilizado en Australia. Para Nuerburgring, el 7 de mayo, en casa, estrenarán unos propulsores que esperan que mantengan el nivel mostrado hoy en Australia.