Massú dejó ahora su récord 2006 en 22 triunfos y 11 derrotas. |
SANTIAGO/ESTORIL.- Massú y Gimelstob se habían enfrentado apenas en una oportunidad. El triunfo fue para el estadounidense, aunque más allá de la victoria, las circunstancias eran especiales: el pasto de Wimbledon llevó a pensar al chileno que en "condiciones normales" el partido le pertenecería.
Massú tuvo hoy su revancha en la arcilla de Estoril (Portugal, 531 mil euros). Y se equivocó. Porque el chileno, 32° del mundo, pese a tener un inicio arrollador, terminó inclinándose por segunda vez ante el norteamericano (97°). El marcador final, tras 2:37 horas de lucha, fue de 6-2, 6-7(3) y 4-6.
Ese comienzo tuvo su mayor virtud en el primer servicio del viñamarino, que más allá de su buen porcentaje de colocación, superior al 60%, encontró una alta efectividad a la hora de liquidar los puntos. Y eso, más su temida derecha, le bastó a Massú para liquidar a Gimelstob de entrada con dos quiebres que lo dejaron 4-0.
El 6-2 en 35 minutos fue el resultado de esa marcada superioridad expresada al principio de la manga, donde incluso el chileno tuvo una oportunidad más de quebrar el servicio de su oponente.
Pero el estadounidense, con 29 años y diez en el circuito de la ATP, siguió buscando su afinidad en la arcilla y el lado débil de Massú. Y poco a poco lo fue encontrando. Por eso la lucha se estrechó y tras un quiebre por lado todo derivó en el
tie break. Ahí Gimelstob sacó a relucir su saque, que ya iba en una mejoría progresiva.
En cambio, el tenista nacional "venía de vuelta". Su servicio ya era controlado por el estadounidense, tanto que su porcentaje de puntos ganados con la que había sido su mejor arma en el inicio, se redujo a un 53%.
Y con un quiebre Gimelstob se encaminó a un triunfo que logró liquidar con su saque en el décimo juego, no sin antes ahber salvado tres bolas en las que Massú pudo igualar las cosas. Pero el chileno terminó ahogándose en esas ganas que tenía de ganar para confirmar sus dichos en Wimbledon el año pasado.
Como anécdota, el próximo escollo de Gimelstob será el español Albert Portas (100°), que dio otra sorpresa tras superar al francés Gael Monfils (35°) en tres sets: 3-6, 7-6(4) y 6-4.
