SANTIAGO.- Ser local, en cualquier deporte, es un incentivo especial para ganar. La Fórmula Uno no escapa a esta lógica y hoy lo demostró Michael Schumacher, quien se quedó con el GP de Europa, que se corre en la ciudad alemana de Nürburgring.
El piloto de Ferrari aprovechó la excelente planificación de su equipo y luego de la segunda detención en pits pudo controlar la carrera sin problemas, relegando al segundo lugar al español Fernando Alonso y su Renault.
La escudería italiana cerró su buena jornada con el tercer lugar del brasileño Felipe Massa, quien se subió por primera vez en su carrera al podio.
Ésta es la segunda victoria consecutiva, y de la temporada, del alemán, quien había triunfado en el anterior GP, el de Imola.
Alonso llegó a esta carrera con una ventaja de 15 puntos sobre el germano, quien con su triunfo logró descontarle dos y confirmar que será un duro rival en el camino del asturiano para revalidar su título.
Raikkonen, el otro corredor que a principios de temporada parecía tener posibilidades de pelear por el campeonato, hoy sólo fue cuarto, demostrando que aún debe mejorar para ser un serio aspirante a luchar con el español y el alemán.
Mejor asegurar
"Mi vuelta de clasificación no fue perfecta, pero confiaba en nuestra estrategia. Creí que íbamos a conseguir adelantar en la primera parada, pero empujé demasiado fuerte y perdí un poco de tiempo. Pero lo conseguimos en la segunda", declaró Schumacher luego de la carrera.
Alonso, por su parte, dijo que: "Es un resultado fantástico para nosotros los ocho puntos, porque estuvimos este fin de semana por debajo de Ferrari en rendimiento, los neumáticos tampoco funcionaron perfectamente. Lo importante es terminar siempre en el podio".
"En Imola pudimos luchar con ellos, pero aquí no había lugar a la lucha. Era sólo cuestión de tiempo que nos adelantasen, así que terminar en medio de los dos Ferrari es una sorpresa positiva, y la segunda plaza es una manera importante de celebrarlo", argumentó.
"Intenté presionar a Michael dos o tres vueltas, pero luego ya bajé las revoluciones del motor para cuidarlo para la próxima carrera", agregó.