SANTIAGO.- Tras una electrizante definición a penales, Colo Colo conquistó su vigesimocuarta estrella tras derrotar a Universidad de Chile por 4-2 (0-1 en el duelo de revancha) en el torneo Apertura 2006.
Los azules vencieron en los 90 minutos con un gol de Figueroa en la segunda etapa, pero en la definición desde los 12 pasos fallaron Droguett y Candelo (no alcanzaron a lanzar el quinto), mientras que por los albos sólo se equivocó Mena.
Está claro que los albos sufrieron. Porque la U los controló, porque la U puso corazón y fútbol, especialmente en la segunda etapa tras el ingreso del colombiano Candelo, pero la lotería de los penales le dio un triunfo histórico por el juego exhibido durante todo el campeonato y porque ya lanzó al mundo futbolístico a jugadores de la talla de Fernández y Suazo.
Eso sí, los colocolinos no pudieron plasmar en la segunda final el juego que les imprimió el técnico Claudio Borghi. Jugaron apretados, contenidos y con pocas ideas, por eso la primera etapa fue estrecha, con poca emoción y que destacó por las tarjetas amarillas (cinco) que mostró Rubén Selman para controlar la fricción que se producía en la mitad del campo.
Borghi debió recurrir a Villarroel para sustituir a un lesionado Meléndez. Y a eso se agregó la levantada azul, un poco determinada por el DT Gustavo Huerta, quien mandó a la cancha a Candelo apenas se inició la segunda fracción tras advertir la ausencia de Meléndez.
Fue el colombiano el mayor responsable del gran juego azul en el complemento. Sus habilitaciones, ese don que tiene para juntarse con sus compañeros y habilitar al con mayor ventaja, hizo estragos en la zaga blanca. Henríquez, Bravo, Mena y González la pasaron mal.
Salas y Canío lo tuvieron, pero Henríquez y el travesaño lo impidieron. La presión no bajó, Bravo se despedía en gran forma con sus tapadas (parte a la Real Sociedad de España) pero tanto va el cántaro al agua... Salas habilitó a Díaz y el centro rasante y fuerte del defensa pasó entre piernas azules y blancas y las manos de Bravo hasta que encontró el zapato de Figueroa.
La celebración azul se hizo poca, porque querían el segundo gol. Y lo tuvo Candelo, un remate de Salas anduvo cerca. Si todo era azul. Porque los blanco no estaban, o sea estaban pero miraban, intentaban carrerones personales, mas en todos perdían antes sus rivales.
Ya cerca del final Borghi mandó a la cancha a Aceval, pensando en su potente zurdazo (y en los penales). Y no se equivocó.
Aceval abrochó la 24 estrella del Cacique. Antes había convertido Fernández, Suazo y Fierro y se había equivocado Mena. Por la U anotaron Salas y Figueroa, pero Droguett y Candelo no pudieron derrotar la resistencia de Bravo.
Y se desató la alegría blanca, el griterío contenido. Y ese cántico que siempre le corea la hinchada a su plantel, el "eterno campeón".
Colo Colo: Claudio Bravo; David Henríquez, Luis Mena, Andrés González; Alvaro Ormeño (85', Miguel Aceval), Rodrigo Meléndez (46', Moisés Villarroel), Arturo Sanhueza, Gonzalo Fierro; Matías Fernández, Jorge Valdivia; y Humberto Suazo. Banca: Varas (AS), Ayala y Tapia. DT-Claudio Borghi
Universidad de Chile: Miguel Pinto; Marcelo Díaz, Waldo Ponce, Adrián Rojas, Rodrigo Jara; Luis P. Figueroa, Manuel Iturra, Hugo Droguett, Patricio Ormazábal (48', Mayer Candelo); Marcelo Salas y Cristián Canío. Banca: Fernández (AS), Moreyra, Pérez y Pino. DT-Gustavo Huerta
Gol: 71', Figueroa 0-1.
Estadio: Nacional.
Arbitro: Rubén Selman.
