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LONDRES.- El tenista suizo Roger Federer, número uno del mundo, avanzó por cuarta vez en su carrera a la final del torneo de Wimbledon, tras vencer al veterano sueco Jonas Bjorkman, 59 del escalafón, por 6-2, 6-0 y 6-2.
Federer, que ganó las últimas tres ediciones del Abierto de Inglaterra, se enfrentará en el pleito decisivo con el vencedor de partido entre el español Rafael Nadal y el chipriota Marcos Baghdatis.
El suizo derrotó a su veterano adversario, de 34 años, en sólo una hora y 17 minutos en la cancha central, conocida como la Catedral.
El partido, que comenzó dos horas más tarde de lo programado por la lluvia, mostró a Federer como nítido dominador durante todos el pleito.
El número uno del mundo logró quebrar el servicio a Bjorkman en el tercer juego del primer set y, con esa ventaja, ganó el primer juego en sólo 27 minutos.
En el segundo parcial, Federer se apuró a quebrar el saque de un errático Bjorkman en el primero, tercero y quinto juego, y con un tenis elegante y muy potente, sumado a un servicio arrollador (205 km/h), se quedó con el juego en 23 minutos.
La manga definitiva fue tarea fácil para el tenista de Basilea, quien desplegó su arsenal de derechas cruzadas y voleas para deshacerse del jugador más veterano que quedaba en la grilla.
"Fue difícil, porque yo era el máximo favorito y siempre espero cumplir con las expectativas. Tenía que ser muy cuidadoso, así que jugué un tenis muy seguro. Jugué un tenis excelente", reconoció el suizo.
Ambos se habían enfrentado hasta hoy tres veces, y todas fueron victorias para Federer, quien, con 38 títulos, conquistó su 47ª victoria consecutiva sobre césped.
El suizo buscará este domingo igualar los récords del estadounidense Pete Sampras (1997-2000) y del sueco Bjorn Bjorg (1976-1980), con cuatro títulos consecutivos en Wimbledon.
Federer se medirá en la final con el ganador del partido que disputaban en la cancha central el español Nadal, segundo favorito y bicampeón de Roland Garros, y el chipriota Baghdatis, 18° preclasificado y que fue finalista en el Abierto de Australia.
En caso de que el suizo se mida con Nadal, será la primera vez desde 1952 que las finales consecutivas de Roland Garros y Wimbledon son animadas por los mismos jugadores, número uno y dos del mundo.
De las siete veces que se enfrentaron, el español, que nunca antes llegó a las semifinales en Wimbledon, se quedó con seis victorias.
