SAO PAULO.- El delantero brasileño Ricardo Oliveira no podrá jugar la finalísima de la Copa Libertadores por el Sao Paulo, y tendrá que presentarse a más tardar el sábado en su club español, el Betis de Sevilla.
En un comunicado divulgado hoy en su página oficial, el club español sepultó las esperanzas del Sao Paulo de prolongar por una semana el contrato de préstamo del jugador, para tenerlo en la cancha en el partido del miércoles próximo, contra el Internacional, que decidirá el nuevo campeón de la Copa Libertadores de América.
En la nota, el presidente del Betis, José León, lamenta que no haya logrado un acuerdo para prorrogar el contrato de Oliveira, lo que atribuye a "la imposibilidad de obtener una respuesta clara y satisfactoria de la Confederación Sudamericana de Fútbol" (Conmebol) sobre la posibilidad de extender el préstamo por sólo una semana.
El comunicado tomó por sorpresa a los dirigentes del Sao Paulo, que hasta la mañana de hoy daban como seguro de que el Bétis le permitiría a Ricardo Oliveira quedarse en el club al menos hasta la disputa del partido de vuelta de la "final brasileña" de la Libertadores.
"Puedo asegurar que Ricardo Oliveira jugará. Estamos hablando con la FIFA y tomando las medidas necesarias para evitar cualquier tipo de sanción", afirmó el superintendente de fútbol del Sao Paulo, Marco Antonio Cunha.
Al parecer, el acuerdo entre Betis y Sao Paulo se volvió inviable a raíz del temor del club español a enfrentar problemas jurídicos, en caso que le permitiera a Oliveira a permanecer en Brasil más allá del plazo del contrato de préstamo.
Por los estatutos de la FIFA y de la Conmebol, los contratos de los jugadores con clubes deben ser firmados por un plazo mínimo de tres meses, y el Betis no acepta liberar a Ricardo Oliveira para el Sao Paulo hasta noviembre.
La propuesta de los dirigentes brasileños de firmar un contrato de tres meses y luego rescindirlo en la semana próxima también es polémica desde el punto de vista jurídico, según el abogado brasileño Piraci de Oliveira, quien consideró que ese tipo de acuerdo podría ser interpretado como una "operación simulada" y resultar en duras sanciones para ambos clubes.
El director de fútbol del Sao Paulo, Joao Paulo Lopes, sin embargo, se manifestó sorprendido por el comunicado del club español: "Recién hablé con nuestros enviados a España y seguimos sin tener una respuesta definitiva del Betis", aseguró.
El Sao Paulo aún espera convencer a la Conmebol a que acepte la prórroga del contrato de Oliveira por una semana.
El argumento del club brasileño es que, al fijar para el 10 de agosto la fecha de expiración del contrato del delantero, el club se basó en el calendario de la Conmebol, que fijaba la fecha del 9 de agosto para el término de la Libertadores.
No obstante, la entidad sudamericana cambió el calendario del torneo continental y aplazó en una semana la fecha de la final, por lo cual el Sao Paulo considera que la Conmebol debería autorizar la permanencia de Oliveira por una semana más.