BERLÍN.- El presidente federal de Alemania, Horst Kohler, distinguió hoy a los jugadores de la selección de fútbol con el Laurel de Plata, la máxima distinción deportiva del país, por su actuación en el Mundial de Alemania, donde el conjunto local se clasificó en tercer lugar.
La ceremonia se celebró en el palacio de Bellevue, la residencia presidencial en Berlín.
En su discurso, el presidente Kohler elogió a los jugadores no sólo por su entrega en la cancha, sino también por su ejemplar actitud y comportamiento. "Nos brindaron a todos nosotros un hermoso e inolvidable verano que les queremos agradecer, por haber desarrollado un estilo (de juego) que nos contagió y que no vamos a olvidar muy pronto", dijo el primer mandatario, quien también mostró gratitud hacia el equipo técnico y demás auxiliares.
No asistió al acto el ex seleccionador Jurgen Klinsmann, quien será condecorado con la Cruz del Mérito alemán, ni el portero Oliver Kahn, que declaró que prefería en esta oportunidad dejar el protagonismo a los jugadores más jóvenes.
Tampoco estuvieron el capitán, Michael Ballack, lesionado ayer con su nuevo equipo, el Chelsea de Londres, su compañero de equipo Robert Huth ni el lesionado Sebastian Kehl, del Dortmund.
En su primer partido postmundialista y bajo la orientación del nuevo entrenador, Joachim Loew, Alemania enfrentará a Suecia el miércoles en un amistoso en Gelsenkirchen.
