LONDRES.- El millonario castillo de Roman Abramovich y José Mourinho, revestido de millones, apenas tardó dos jornadas en desmoronarse. El Chelsea perdió ante el Middlesbrough y el técnico portugués tiene claro quiénes son los culpables: sus estrellas.
"Fuimos demasiado pasivos, sólo reaccionamos cuando fuimos perdiendo. El asunto es que sabemos por qué fuimos campeones dos veces y desde luego no fue con esta actitud", dijo duro Mourinho, según relata la página web del club inglés.
La noche del miércoles el Chelsea perdió en la segunda jornada de liga inglesa en el campo del Middlesbrough por 2-1, después de que Andrei Shevchenko adelantara a los "blues". Pero el "Boro" remontó y el australiano Mark Viduka, a un minuto del final, sentenció el choque.
Para el partido el domingo ante el Blackburn el técnico portugués anunció que hará cambios sobre el césped y espera poder contar ya con el lesionado Michael Ballack y con el recién fichado central holandés Khalid Boulahrouz. Es el segundo revés de los "blues" tras perder la Supercopa con el Liverpool.
"Es un buen ejemplo de cómo no se debe jugar un partido fuera de casa, especialmente en este país donde siempre hay emoción y la gente estimula a su equipo con sólo pequeñas cosas", agregó Mourinho.
"El Middlesbrough mereció ganar. No hay quejas por mi parte ni hacia los oponentes, ni contra el árbitro. No podemos culpar a la mala suerte, sólo a nuestra propia actuación", comentó.
"Cuando un equipo puede jugar como lo hicimos del minuto 80 al 90, cuando casi ganamos otra vez el partido, es porque somos capaces de hacerlo", agregó Mourinho.
El portugués cargó, sobre todo, contra la actitud de los suyos. "Para mí fue la actitud. El fútbol dura 90 minutos, no 75. En general la actitud de ellos fue más fuerte que la nuestra".