SAITAMA, Japón.- Argentina-España (6:30 en Chile) y Estados Unidos-Grecia (3:30) protagonizarán este viernes en Saitama las mejores semifinales que podía esperar el Mundial 2006 de Básquetbol, entre cuatro selecciones invictas que aplastaron a sus rivales y siguen con sed de título.
Jamás la jerarquía fue tan clara en un torneo completamente dominado por estas cuatro potencias. Sólo hace falta mirar la diferencia de puntos que marcaron ante sus adversarios en sus siete triunfos: 25 para Estados Unidos y España, 24 para Argentina y 13 para Grecia.
España-Argentina será un duelo entre falsos gemelos. Los dos equipos tienen muchos puntos en común: mismo idioma, mismo equipo de ensueño tirado por superestrellas de la NBA (Pau Gasol y Emanuel Ginóbili), colectivo con experiencia jugando junto y... mismo apellido de seleccionador (Hernández).
Un mimetismo que impide dar un pronóstico preciso de favorito.
La selección ibérica, cuyo mejor resultado es una medalla de plata en los Juegos Olímpicos de 1984, quiere por fin ganar un título mundial por primera vez en su historia.
Argentina, campeón olímpico, pretende curar la herida de la final del Mundial 2002, que perdió en tiempo extra contra Serbia y Montenegro.
Ambos equipos se enfrentaron dos veces este verano (boreal) durante la preparación mundialista y los españoles ganaron con autoridad.
Estados Unidos-Grecia será un duelo de estilos. Es difícil encontrar dos equipos con estilos de juego tan diferentes, entre el campeón de europa y las acrobáticas estrellas de la NBA.
Grecia se apoya en una defensa de hierro, ruda, física, que se deshizo de Francia casi sin despeinarse. En cambio, Estados Unidos tiene un ataque de ensueño, con talentos individuales capaces de cualquier cosa y disparos a distancia desde posiciones impensables.
Grecia se aseguró de conseguir su mejor resultado de la historia en Mundiales (4º en 1998 y 1994), mientras que Estados Unidos pretende volver al escalón más alto del podio, después de los fracasos de JJ.OO. 2004 (3º) y el Mundial 2002 (6º).