LISBOA.- La FIFA otorgó diez días de plazo a la Federación Portuguesa de Fútbol (FPF) para resolver un conflicto legal con el club Gil Vicente, que interrumpió el comienzo de la liga más importante de ese país, dijeron las autoridades del fútbol luso.
De acuerdo con el sitio oficial de internet de la FPF, la FIFA decidió que se reuniera su comisión de emergencia para analizar la suspensión de la federación portuguesa de todos los certámenes internacionales, si no se logra una solución del asunto al 14 de septiembre.
"Esta situación no sólo debilita al fútbol, sino que además afecta la integridad de las competencias", dijo la FIFA, según la federación lusitana.
El litigio se inició el mes pasado con el descenso del Gil Vicente de la primera división local, por la mala inclusión en su equipo del jugador angoleño Mateus.
El pequeño club del norte de Portugal, que tiene 5.000 socios, solicitó a una corte civil que autorizara al jugador africano a competir, en contravención con los reglamentos de la liga y la de FIFA.
La entidad rectora del fútbol mundial, la FIFA, intervino en la disputa y urgió a la federación portuguesa a que llegue a una solución en el ámbito de los órganos del fútbol.
