LONDRES.- El defensa francés William Gallas negó las acusaciones vertidas por su anterior club, el Chelsea inglés, sobre su deliberada intención de anotar un gol autogol si le obligaban a permanecer en el plantel.
La marcha de Gallas al Arsenal a cambio de que Ashley Cole recalara en el Chelsea de José Mourinho se realizó pocos minutos antes de que finalizara el plazo de fichajes, cerrándose así uno de los conflictos de la pretemporada en el fútbol inglés.
Gallas dejó claro al final de la pasada temporada que estaba dispuesto a dejar Stamford Bridge y el deseo de Cole de vestir de "blue" hacía factible el intercambio con el Arsenal. El acuerdo se fue enquistando y se cerró finalmente aunque con una declaración oficial muy dura por parte del Chelsea contra el jugador.
El campeón de la liga inglesa aseguró que el defensa francés había amenazado al club con anotar un gol en propia meta, marcharse del campo o cometer errores de forma deliberada si Mourinho le convocaba para el partido inaurugal de la liga inglesa contra el Manchester City.
"Estoy sorprendido y estupefacto ante esas afirmaciones", dijo Galals, según recoge hoy la prensa inglesa. "Nunca dije que marcaría un gol en propia meta. Era muy firme en mi deseo de marcharme, eso está claro, y explicaré en su momento adecuado el porqué", agregó.
"Si la gente se quiere esconder detrás de estas excéntricas acusaciones para explicar mi marcha en lugar de asumir sus responsabilidades ante sus aficionados, entonces pueden hacerlo", explicó Gallas.
"Todo esto es muy mezquino por parte del Chelsea. Pero al mismo tiempo, viniendo de sus nuevos dirigentes, no me sorprende. Aunque el Chelsea tiene mucho dinero, a sus dirigentes les falta clase", agregó el defensa.
La declaración del Chelsea también acusaba al defensa de "venderse al mejor postor". Gallas se negó a unirse al grupo en la gira por Estados Undios que hizo el equipo en pretemporada, alegando que estaba cansado tras el Mundial de Alemania, donde fue finalista con Francia.
"Cuando José Mourinho generosamente le ofreció la posibilidad de volver a la 'familia' después de la gira, el ofrecimeinto fue tirado a la cara de nuestro mánager", continuó el comunicado.
El Chelsea asegura que antes del primer partido de la Premier League ante el Manchester City "cuando sólo cuatro defensas estaban disponibles y John Terry era dudoso por una lesión, se negó a jugar".
"Continuó amenazando diciendo que si era forzado a jugar o si era castigado disciplinaria o financieramente, entonces marcaría un gol en propia puerta, se marcharía del campo o cometería errores deliberados", agregó.
"Claramente esta era una situación totalmente inaceptable para el mánager, el equipo y el club", añadió.
"Williams Gallas rara vez reconoció sus responsabilidades ni el papel que José Mourinho y el Chelsea desempeñaron para ayudarle a ganar dos ligas consecutivas a un jugador como él, cuyo único título anterior fue en la segunda división francesa", concluyó.
