El dueño del Inter, Massimo Moratti, lanzó ácidas denuncias contra su club que remecen el calcio.
AFP
MILÁN.- El Inter de Milán asegura ser el objetivo de una conspiración en su contra para implicarlo en un escándalo de espionaje, según aseguró su dueño, Massimo Moratti, en una entrevista que publica hoy el diario La Gazzetta dello Sport.
"Después de pagar durante años un alto precio a la estructura dirigida por ciertos clubes, lo que quedó ya demostrado, ahora somos el objetivo de una estructura de medios de más o menos las mismas características. Bien, esperemos que salgamos también de ésta", afirmó Moratti.
El dirigente tuvo que declarar el martes ante Severio Morrelli, que investiga en nombre de la Federación Italiana de Fútbol (FIGC) un supuesto caso de espionaje ordenado por el Inter al árbitro Massimo de Santis y a su ex futbolista Christian Vieri.
Borrelli basa sus investigaciones en las declaraciones de dos personas actualmente en prisión acusados de haber espiado a un gran número de empresarios y famosos italianos accediendo ilegalmente a bancos de datos estatales.
El fiscal espera recibir más documentación y pruebas de los fiscales que están investigando judicialmente el caso.
Según publica hoy la prensa, Moratti reconoció que el Inter puso a Vieri bajo vigilancia en 2001, y agregó que "alguien" ofreció al club espiar a De Santis en 2003, pero que aportó sólo información superficial.
El espionaje a Vieri y a De Santis, que fue condenado hace unos meses por el escándalo de corrupción en el "calcio", fueron supuestamente llevados a cabo a través de un investigador privado, pero podría llevar a que el Inter sea acusado de faltar al juego limpio.
Sólo Moratti, que era el presidente del club cuando se produjeron los hechos, podría ser sentenciado, porque el club está protegido por la norma de la FIGC que prescribe las faltas a los dos años. Moratti aún puede ser acusado en el caso de De Santis, porque el período se amplía a cuatro años para las personas.
De Santis aseguró que espera justicia "porque el asunto es grave", mientras Vieri afirmó a través de su abogado que esperará a la resolución del caso para emprender eventuales acciones legales contra su antiguo club.
El Inter de Milán fue el gran beneficiado por el escándalo de arreglo de partidos descubierto hace unos meses. Además de ser descendida a segunda división, la Juventus fue desposeída del título de la liga 2005-06, que fue adjudicado al Inter. También fueron castigados Milan, Lazio y Fiorentina.
