El volante Luis Jiménez, en tiempos cuando no tenía problemas en estampar su firma en la camiseta de la Ternana.
Leonardo Burgueño, El Mercurio
ROMA.- El conflicto entre Luis Jiménez y la Ternana se agravó hoy, después que los abogados del jugador chileno pidieron a la Federación Italiana de Fútbol (FIGC) que declare caduco su contrato con el club italiano "por justa causa".
La presentación fue hecha por Luca Ferrari, abogado penalista que asiste a Jiménez, con un documento en el que solicita al organismo que autorice al chileno a fichar por otro club en enero, cuando se reabra el libro de pases de la liga italiana.
La caducidad por "justa causa" tiene variadas fundamentaciones, a partir del conflicto que se abrió cuando, sin razones de ningún tipo, Ternana canceló el pasado 31 de agosto, a pocas horas del cierre del libro de pases, la acordada transferencia del jugador a Lazio.
Uno de los fundamentos citados por el abogado es que Jiménez "corre el riesgo de quedar desocupado": no se entrena desde hace dos meses con el plantel de Ternana, de la Serie C y con el que ha interrumpido toda vinculación.
Esta eventual circunstancia mereció hoy una respuesta irónica por parte de los directivos de Terni: "Es extraño oír hablar de amenaza de desocupación por un jugador que en cuatro años de militancia en nuestro club ha ganado 2 millones de euros (US$ 2,54 millones)".
Jiménez, quien se encuentra en Chile debido a problemas familiares, renovó contrato con el club de Terni el pasado 13 de enero, con validez hasta junio de 2010, y gana actualmente 400.000 euros (US$ 507 mil) por año.