SANTIAGO.- El club chileno Colo Colo ofreció hoy una recompensa de un millón de pesos (unos 1.900 dólares) a quien dé datos concretos para identificar a el o los responsables de lanzar un proyectil que impactó a un jugador de Gimnasia y Esgrima de La Plata, anoche en el Estadio Monumental de Santiago.
El incidente ocurrió al minuto 86, cuando el "Cacique’’ celebraba el 4-1 que casi le daba los boletos a la semifinal de la Copa Sudamericana, pero un trozo retirado de los asientos del estadio dio en el argentino Nicolás Cabrera. El árbitro paraguayo Carlos Torres y el veedor venezolano Mario Campos determinaron suspender el partido.
El presidente de la entidad chilena, Cristián Varela, afirmó que la idea es que no haya impunidad, que la gente pierda el miedo a hacer denuncias para que los autores de hechos de violencia lleguen ante la Justicia y que las familias retornen a los estadios.
"Nos parece tan grave y nos avergüenza tanto lo que ayer vivimos... Hemos tratado de dar disculpas a quienes asistieron, a los mismos argentinos que vinieron, porque Chile no es así, y nos parece indispensable que quienes actuaron en este acto vandálico no queden impunes’’, sostuvo Varela.
Por el momento, afirmó que hay tres jóvenes sospechos de los cuales tienen fotografías, lo que podría ayudar en las indagaciones.
El cuadro "albo’’ temió incluso perder los puntos de la victoria pero finalmente la Conmebol determinó respetar el resultado y suspender al Monumental por dos fechas, castigo que podría ampliarse con sanciones económicas. De esta forma, si el cuadro "albo’’ avanza a otras instancias deberá elegir otro recinto, seguramente el Estadio Nacional de Santiago.
El castigo fue considerado benévolo en Chile y estuvo lejos de las peores perspectivas que tenían el entrenador Claudio Borghi y los dirigentes colocolinos, que admitieron que lo ocurrido fue inaceptable por lo que se manifestaron dispuestos a recibir cualquier castigo, incluso la pérdida de los puntos.
En Santiago se estima que en el veredicto influyó precisamente la condena unánime sobre esta agresión que hicieron los jugadores, el técnico y la dirigencia del club chileno.
También se afirma que el informe de Mario Campos fue determinante ya que sostuvo que el incidente que obligó a la suspensión del encuentro de cuartos de final fue "un hecho aislado’’ y que la conducta de la gente de Colo Colo, jugadores y autoridades, fue ’’excelente’’ y todo se desarrolló de manera normal hasta que unos pocos "empañaron todo’’.
Cabe señalar que la acción fue repudiada unánimente por todos los sectores chilenos y que quedó descartado que el proyectil hubiera salido desde la "barra brava’’ de Colo Colo.
Los asistentes también reaccionaron con estupor y vergüenza, pues se produjo un silencio absoluto cuando Cabrera cayó al suelo y se fueron con la cabeza baja cuando se dio por terminado el encuentro, que debió haber terminado en fiesta.
Los comentaristas y medios chilenos elogiaron hoy la nobleza y caballerosidad del entrenador del "Lobo’’, Pedro Troglio, ya que desde un inicio se opuso a que se castigara al estadio o se le quitara el triunfo al local, que consideró merecido.
Por el contrario, fueron criticadas unas declaraciones que hizo el presidente del "Lobo’’, Juan José Muñoz, quien dijo que -a raíz de los hechos de Santiago- "teme’’ por la seguridad de Colo Colo en La Plata y advirtió que no podrá "manejar’’ a su hinchada en la revancha.