Barcelona vive semana clave en la Liga de Campeones

BARCELONA/MUNICH.- La temporada apenas está comenzando, pero el Barcelona afronta ya mañana un partido crucial para su futuro, con la defensa de los títulos de la Liga de Campeones y de la liga española como desafío.

Los azulgrana reciben al Chelsea en la cuarta jornada de la competición europea, con la necesidad de ganar para no meterse en problemas. Tras la derrota en Stamford Bridge por 1-0 hace dos semanas y el empate ante en Bremen, el Barcelona es segundo en el grupo con cuatro puntos, los mismos que el Werder Bremen y cinco menos que su rival de mañana. Una derrota pondría en serios aprietos al campeón.

El partido es muy distinto para los londinenses. Un triunfo en el Nou Camp los clasificaría para los octavos de final, y podrían tomarse con mucha calma los dos partidos que faltan. Si eso sucediese, jugaría además en contra de los intereses del Barcelona.

"El partido de mañana es realmente vital para nosotros", afirmó el defensa Oleguer Presas. "No podemos permitirnos perder más puntos en este grupo", agregó.

Las buenas noticias son el probable regreso al once titular del astro argentino Leonel Messi tras la lesión que sufrió hace más de una semana ante el Real Madrid, y el resurgir de Ronaldinho, autor de dos goles el sábado en liga ante el Recreativo. La mala es que el camerunés Samuel Eto’o sigue lesionado y que su sustituto, el islandés Eidur Gudjohnsen, empieza a levantar recelos en el público.

El Chelsea llega eufórico no sólo porque es líder en Europa y en su liga, sino porque hasta Barcelona viajaron dos de sus estrellas que estaban en duda: Andrei Shevchenko, que no jugó el sábado ante el Sheffield United por una lesión en un muslo, y Didier Drogba, que se retiró en el descanso por un golpe.

En el otro partido del grupo A, el Werder Bremen está obligado a confirmar que puede estar en octavos de final de visita ante el equipo más débil del grupo, el Levski Sofía búlgaro, que aún no sumó puntos y acumula sólo un gol a favor por diez en contra.

El triunfo les aseguraría terminar terceros en el grupo y jugar así la Copa de la UEFA, pero sus apsiraciones son mayores: ganar y jugarse la segunda plaza en un apasionante partido en Barcelona.

"Queremos seguir en la competición todo lo que sea posible. No jugamos la Liga de Campeones para llegar a la Copa de la UEFA", afirmó.

El Bremen está en racha goleadora, con quince goles en sus últimos partidos en la Bundesliga, entre ellos el 6-1 del viernes al Maguncia. A pesar de ello, el centrocampista Torsten Frings asegura que el vestuario no subestima al Levski.

"Sólo el éxito cuenta, y no cómo juguemos. Tenemos suficientes jugadores en el equipo que nos mantienen con los pies en la tierra. Si vamos al partido confiados seremos nosotros los que nos llevemos seis", sentenció.

El campeón alemán, el Bayern Munich, lo tiene más sencillo. Le basta un empate en casa ante el Sporting de Lisboa para certificar su pase a octavos de final en el Grupo B. Un triunfo ante el equipo de Rodrigo Tello y que el Inter no sea capaz de ganar al Spartak de Moscú les aseguraría a los alemanes también el primer puesto.

Los "nerazzurri" realizan el siempre complicado viaje a Moscú con la moral alta tras su espectacular triunfo por 4-3 en el "clásico" ante el AC Milan.

"Si estamos tan concentrados como en el ’derby’, nadie podrá ganarnos. Ya en la primera parte, hace dos semanas, hubo una clara diferencia entre el Spartak y nosotros", afirmó el serbio Dejan Stankovic.

El técnico Roberto Mancini no podrá contar con el centrocampista francés Patrick Vieira, que se dañó un tobillo el sábado, y es duda el arquero brasileño Julio Cesar.

En el Grupo C, tanto el Liverpool de Mark González como el PSV Eindhoven necesitan ganar en casa al Girondins de Burdeos y al Galatasaray, respectivamente, para asegurarse el pase a los octavos.

También pasará el Valencia, que lleva un expediente impecable de tres victorias, si vence al Shakhtar Donetsk ucraniano. Incluso un empate podría bastar si la Roma de David Pizarro arranca al menos un punto ante el Olympiakos.